El presidente de Bolivia, Luis Arce, ha anunciado la composición de su nuevo gobierno, un gabinete que será «sumamente austero» en palabras del mandatario y en el que no figuran nombres en la primera línea política durante la Administración de Evo Morales, más allá de algún viceministro.
Arce, exministro de Economía durante la última etapa de Morales, se ha marcado precisamente la recuperación económica como uno de sus principales objetivos, ya que considera que el Gobierno de Jeanine Áñez ha hecho «añicos» el escenario financiero boliviano.
«No es solo recuperación, sino reconstrucción de la economía. Por eso hemos recurrido a lo mejor que podíamos traer para trabajar en un equipo, en una familia, porque lo que nos resta a los bolivianos solo es trabajar para salir de la crisis», ha declarado, según el diario local ‘La Razón’.
Arce tendrá como principal aliado al vicepresidente David Choquehuanca, que también ocupó cargos ministeriales en la anterior etapa del Movimiento al Socialismo (MAS) en el poder. Junto a ellos estará un gabinete «a la altura de lo desafíos», según el flamante presidente.
Arce recupera como ministra de la Presidencia a su anterior jefa de gabinete, María Nela Prada, mientras que en Exteriores estará Rogelio Mayta, un abogado vinculado al MAS. También del Derecho procede Carlos Eduardo del Castillo del Carpio, nuevo titular de Gobierno (Interior), y el exoficial Mayor del Senado y exgobernador de Cochabamba Edmundo Novillo se incorpora al frente de Defensa.
El equipo económico estará liderado por Marcelo Montenegro Gómez como responsable de Economía y Finanzas. Entre 2017 y 2019 ocupó la presidencia del Banco de Desarrollo Productivo (BDP) y tiene experiencia en la dirección de varias empresas públicas, informa ‘El Deber’.
Arce ha adelantado, además, que en los próximos días nombrará a una ministra de Culturas, si bien para ello es necesario reformar «la estrucrura armada por el régimen anterior», en alusión a la composición ministerial heredada de la etapa de Áñez.
