La Organización de los Estados Americanos (OEA) ha condenado este viernes el uso de «la fuerza y tácticas intimidatorias» por parte del Gobierno de Nicolás Maduro para «obstruir el libre acceso de los diputados a la Asamblea Nacional (AN)» venezolana y ha aplaudido la reelección del líder opositor Juan Guaidó al frente de la cámara.
En una resolución sobre los últimos acontecimientos en Venezuela, la OEA ha hecho alusión a los sucesos registrados el pasado 5 de enero en el Palacio Legislativo durante la sesión para elegir a la nueva Junta Directiva de la AN.
Así, ha hecho un llamamiento al «pronto retorno de la democracia en Venezuela» y ha reafirmado «la necesidad de celebrar elecciones presidenciales incluyentes, libres, justas y transparentes, con un Consejo Nacional Electoral y un Tribunal Supremo de Justicia renovados, que gocen de autonomía».
En este sentido, ha pedido que se «cuente con la presencia de observadores internacionales independientes para llevar a cabo una investigación».
La organización ha vuelto a condenar «las violaciones graves y sistemáticas de los Derechos Humanos en Venezuela», así como el «uso de la tortura, detenciones ilegales y arbitrarias, ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas y la negación de derechos y necesidades básicas, especialmente las relacionadas con la salud, la alimentación y la educación».
La Asamblea Nacional debía elegir el 5 de enero una nueva cúpula en una votación en la que Guaidó esperaba ser ratificado como jefe del Parlamento, cargo que le permite mantenerse como «presidente encargado».
Sin embargo, las fuerzas de seguridad impidieron a Guaidó y a la oposición mayoritaria acceder a la sede legislativa, por lo que la votación se celebró en la redacción del diario venezolano ‘El Nacional’ con 100 votos, 16 más de los necesarios.
Al mismo tiempo el ‘chavismo’ y la oposición minoritaria designaban a Luis Parra como presidente de la Asamblea Nacional en una votación que tenía lugar en el Palacio Legislativo.
La bicefalia en el Parlamento se enmarca en el pulso que Guaidó y Maduro mantienen desde hace un año para ser reconocidos por la comunidad internacional como mandatarios legítimos de Venezuela.
«AUMENTAR LA PRESIÓN»
Por su parte, el autoproclamado «presidente encargado» de Venezuela, Juan Guaidó, ha dado las gracias a la OEA a través de su cuenta de Twitter por haber ratificado su «apoyo a la causa de Venezuela» y por condenar el «intento de dictadura de tomar por la violencia el Parlamento».
También, ha sostenido que el mundo se «solidarizó» con Venezuela, el Parlamento y los «dignos y valientes» diputados de su partido. «Nos toca aumentar la presión para lograr el desenlace a la crisis en nuestro país», ha añadido.
El enviado especial de Estados Unidos para Venezuela, Elliot Abrams, ha asegurado que la intervención militar en el país no depende de Guaidó, sino que es decisión del presidente estadounidense, Donald Trump. «Todas las opciones están sobre la mesa», ha indicado. «Cuando un presidente de Estados Unidos quiere utilizar la fuerza para nuestros intereses nacionales va a utilizarla», ha asegurado Abrams en unas declaraciones recogidas por TV Venezuela Noticias.