El presidente argentino, Alberto Fernández, ha asegurado este martes en su discurso en la Asamblea General de Naciones Unidas que se necesitan unas «Naciones Unidas 4.0», al tiempo que ha vuelto a reclamar la soberanía argentina sobre las Islas Malvinas.
En su discurso, Fernández ha reivindicado el deber de los presidentes mundiales de «ser arquitectos de una nueva casa común» y ha hecho mención a las posibles reformas del Consejo de Seguridad de la ONU o la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Además, el mandatario argentino ha hecho alusión a que este año se cumplirán 55 años desde la primera resolución de Naciones Unidas en la que se llamaba a Reino Unido y a Argentina a resolver su disputa territorial por las Islas Malvinas y los archipiélagos colindantes.
La disputa por este archipiélago situado en el Atlántico Sur, que data de décadas y llegó a desembocar en una guerra en 1982, continúa enquistada y el presidente argentino ha acusado a los británicos de incrementar la tensión en la región por la elevada presencia de tropas.
Fernández también ha apelado específicamente en su discurso a Irán, al que ha pedido que colabore con la justicia argentina en la investigación del atentado perpetrado en 1992 contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en Buenos Aires.
El ataque terrorista contra esta asociación judía dejó 85 muertos y aún no hay culpables condenados, aunque el Gobierno argentino emitió notificaciones rojas de la Interpol –que piden la detención de un individuo para su posterior juicio– contra varios exdirigentes iraníes acusados de ser autores intelectuales del mayor atentado en la historia del país.
Por otra parte, Fernández ha llamado a «globalizar la solidaridad» y aumentar la cooperación entre países para descubrir no solo una vacuna contra el coronavirus, sino también vacunas «contra la injusticia social, la depredación ambiental y la discriminación».
En clave nacional, el presidente argentino ha hecho alusión a las negociaciones para la reestructuración de las deudas del país sudamericano con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El jefe de Estado argentino ha asegurado que encarará las conversaciones «de manera responsable y siendo respetuosos de los compromisos contraídos, evitando al mismo tiempo poner en riesgo las condiciones que permitan la reactivación económica».