El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, ha defendido este domingo la «reestructuración» de las fuerzas de seguridad del país en respuesta a las denuncias sobre violaciones de Derechos Humanos planteadas por la ONU en un informe.
«Es el momento de una reestructuración, no solo del FAES, sino de varios cuerpos policiales», ha afirmado Saab en una entrevista con la televisión pública venezolana.
Saab ha destacado que el Ministerio Público ha imputado a decenas de funcionarios en casos como los de Guacamaya TV o el de la prisión de Portuguesa, ya que su despacho tiene la función de atender estos incidentes y realizar las llamadas de atención pertinentes.
Así, tanto en la Policía Nacional Bolivariana, (PNB), como en la Fuerza de Acciones Especiales deben siempre atender la reestructuración y la depuración. «Es importante para la salud pública de la seguridad en el país que cíclicamente» se haga esta revisión, ha argumentado.
Saab ha destacado que la Alta Comisionada de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, responsable del reciente informe que recoge graves violaciones de Derechos Humanos en Venezuela, está al tanto de las medidas sanciones impuestas a funcionarios e instituciones.
Bachelet actualizó el viernes su informe sobre Venezuela y denunció, entre otras cuestiones, que se han organizado las elecciones del 6 de diciembre «sin un proceso inclusivo» previo y que las fuerzas de seguridad han matado solo este año a unos 2.000 jóvenes en barrios «marginados».
Saab ha defendido también la importancia de las elecciones legislativas del 6 de diciembre, en las que se renovará a la actual Asamblea Nacional, controlada por la oposición. «No solo ha estado en desacato, sino que ha cometido actos en contra de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela», ha indicado Saab.
