El empresario Branko Marinkovic, acusado de sedición y separatismo por la Administración del expresidente Evo Morales, ha asumido este miércoles el cargo de Ministro de Planificación del Desarrollo de Bolivia.
Marinkovic, que regresó a Bolivia en febrero después de haber vivido exiliado en Brasil durante una década, sustituye a Carlos Melchor Díaz Villavicencio, que dimitió el martes.
El empresario ha explicado que nunca ha ejercido ningún cargo público, pero que ha aceptado porque así se lo ha pedido la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez.
«Toda mi vida trabajé en la agroindustria, en las empresas, en el campo, nunca tuve un cargo político, este es el primer cargo público que hoy acepté, gracias a la presidenta por su persona y por lo que ella es», ha señalado el empresario, que también fue presidente del Comité pro Santa Cruz.
Asimismo, Marinkovic ha asegurado que, después de su exilio, no guarda rencor «a nadie», según ha informado el diario local ‘Página Siete’, aunque ha detallado que «exiliado por el anterior régimen» aprendió «la gran importancia que tiene la libertad y democracia para la sociedad».
«Después de diez años de exilio no guardo rencores a nadie, sino que guardo un profundo agradecimiento al aprendizaje que he tenido de mi familia, que me acompañó, y esos diez años me enseñaron más que nada que no se trata de rencor, que no se trata de venganza, se trata más bien de devolver al país lo que le ha dado a uno y tiene que nacer por el amor que tiene con el país», ha indicado.
Marinkovic también es exgerente general de Industrias Oleaginosas, S.A., una empresa con 460 empleados dedicada al procesamiento de 1.600 toneladas diarias de soja. También fue accionista y director del Banco Económico, pero en 2010 dejó la entidad financiera.a