La jornada comenzó con la llegada de los 50 miembros escogidos por la ciudadanía al emblemático edificio del ExCongreso (que albergó a las cámaras parlamentarias hasta 1973) en el centro de Santiago, quienes participaron de una modesta ceremonia que abrió Boric con un discurso de diez minutos. «Hoy asumen ustedes una tarea que ha sido encomendada por el pueblo de Chile y por su historia: representar a la ciudadanía en la elaboración de una nueva carta magna. Recordar que este Consejo se instala hoy tras un largo camino donde primaron los acuerdos», afirmó.
Boric, pidió a todos los sectores políticos que sean «capaces de poner el bien común sobre los intereses particulares, que primen los acuerdos y que todos seamos conscientes de ello».
DIRECTIVA
La primera decisión que tomó el Consejo al iniciar sus labores fue escoger a los miembros de la directiva. En el cargo de presidenta fue electa la abogada Beatriz Hevia, representante de la Región de Los Lagos (sur) y militante del Partido Republicano (ultraderecha).
En el cargo de vicepresidente fue electo Aldo Valle, exrector de la Universidad de Valparaíso, sin militancia pero cercano al Partido Socialista (centroizquierda).
«Es un deber de los consejeros procesar las diferencias que tenemos para poder llegar a un texto final que interprete de la manera más fiel a los millones de chilenos que han confiado en nosotros. Chile no está bien, como representante del sur, doy fe de la crisis profunda, que la antecede una crisis moral, con la descomposición por la vida familiar», sostuvo en su discurso inaugural la recién asumida presidenta.
UNO MENOS
Para integrar el Consejo Constitucional la ciudadanía escogió a 51 consejeros. No obstante, este miércoles sólo asumieron 50, ya que el ingeniero Aldo Sanhueza, miembro del Partido Republicano, no llegó a la ceremonia.
Sanhueza se vio envuelto en una polémica pues, una semana antes de ser electo, la prensa dio a conocer que la justicia lo condenó por abusar sexualmente de una mujer en un bus. A pesar de ello, Sanhueza logró el escaño con más de 109 mil votos, lo que generó diversos debates sobre si debía o no asumir el cargo.
El 26 de mayo, Sanhueza publicó un comunicado en sus redes sociales manifestando su decisión de no asumir como consejero, argumentando que: «la izquierda radical ha decidido utilizarme como una excusa para deslegitimar el proceso».
La situación se enredó aún más la semana pasada, cuando el Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel) estableció que Sanhueza no podía renunciar antes de ser investido y aseguró que el ingeniero debía asistir a la ceremonia, jurar o prometer ante la ley y recién ahí, abdicar.
Tras una serie de críticas y argumentos contra lo que sería esa absurda situación, el Tricel determinó esta semana no proclamar a Sanhueza y además, estableció que no podía ser reemplazado, por lo que el órgano quedaría finalmente con 50 integrantes.
La primera fase del proceso constitucional culminó la semana pasada cuando la Comisión Experta, órgano de 24 comisionados designados por el Congreso Nacional, terminó de redactar el anteproyecto constitucional que consta de 14 capítulos con 215 artículos, que servirá de base y hoja de ruta para que el Consejo redacte su propuesta.
El Consejo Constitucional tiene cuatro meses para escribir el documento y el 7 de octubre se iniciará un proceso mixto donde consejeros y expertos irán ordenando y realizando observaciones al texto.
La entrega final del documento a la ciudadanía se realizará el 7 de noviembre y esta será plebiscita el 17 de diciembre. Si se aprueba, el texto reemplazará a la actual Constitución redactada durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).