En estos tiempos de profunda crisis económica, la siderurgia ocupa un lugar destacado, pues es la base de otras muchas industrias como son el automóvil, la construcción o la construcción naval. Según la Asociación Mundial del Acero, la producción mundial de acero bruto de los 66 países que presentaron informe a esta Asociación, fue de 109 millones de toneladas en el pasado enero, lo que representa un 25,5% superior a enero del año pasado. La producción de acero crudo en China, en enero del presente año, ha sido de 48,7 millones de toneladas, lo que significa un aumento del 18,2% con relación a enero de 2009. Japón produjo 8,7 millones de toneladas, también en enero del presente año, lo que significa un aumento del 36,8% en comparación con el mismo mes del año pasado. Corea del Sur produjo 4,5 millones de toneladas de acero en enero de este año, con un incremento del 32,4% con relación al mismo mes del año pasado. En estos tiempos de profunda crisis económica, la siderurgia ocupa un lugar destacado, pues es la base de otras muchas industrias como son el automóvil, la construcción o la construcción naval. Según la Asociación Mundial del Acero, la producción mundial de acero bruto de los 66 países que presentaron informe a esta Asociación, fue de 109 millones de toneladas en el pasado enero, lo que representa un 25,5% superior a enero del año pasado. La producción de acero crudo en China, en enero del presente año, ha sido de 48,7 millones de toneladas, lo que significa un aumento del 18,2% con relación a enero de 2009. Japón produjo 8,7 millones de toneladas, también en enero del presente año, lo que significa un aumento del 36,8% en comparación con el mismo mes del año pasado. Corea del Sur produjo 4,5 millones de toneladas de acero en enero de este año, con un incremento del 32,4% con relación al mismo mes del año pasado.
Dentro de la Unión Europea, Alemania, Francia y España han experimentado la misma tendencia. Estados Unidos produjo 6,1 millones de toneladas de acero crudo en enero de 2010, con un aumento del 48,8% en comparación con enero de 2009. Si contemplamos otros países como Turquía, Brasil, Rusia y Ucrania, la tendencia es la misma. La recuperación económica se está extendiendo a todas las grandes economías pero, a pesar de los datos dados, el profundo impacto de la crisis persiste y la recuperación es, según los expertos, todavía tibia y altamente vulnerable.
Los indicadores son positivos. Hay aumento de la producción y los índices de compra están subiendo en todo el mundo. Por otra parte, las fábricas están tratando de producir al máximo debido a que los precios de las materias primas, van a subir, en fecha próxima. Por otra parte, los gigantes del mineral de hierro están encerrados en negociaciones con empresas siderúrgicas asiáticas para fijar los próximos precios. Se espera que presionen para que las siderúrgicas acepten aumentos de precios de cerca del 40% o más. Dicho sencillamente los precios del acero suben, lo mismo que la producción, aunque algunos analistas estiman que la fabricación tendrá grandes variaciones a lo largo de este año, que dependerán de las regiones. Otro gigante, como es Estados Unidos, que es el cuarto productor mundial de acero, mantiene, más o menos, esta situación.
Por otra parte, la morosidad y la crisis económica, están asfixiando a las empresas españolas del sector de prefabricados y derivados del cemento. Y la construcción está íntimamente ligada con la industria del acero. Hoy, 180 días de demora en el pago se ha convertido en algo habitual en este sector. Si a ello se une la fuerte caída de la demanda y la eliminación de la cobertura de crédito, la situación se hace poco más o menos insostenible.
Las 15,000 empresas englobadas en el sector que representa Fedcam (Federación Empresarial de Derivados del Cemento y Materiales de la Construcción) padecen una demora en los pagos equivalente a 1,700 millones de euros en gastos financieros. Lo que ha dado lugar a que más de un tercio de las empresas de este sector hayan presentado expedientes de regulación de empleo, que han llegado a afectar a más del 55% de la plantilla. Y esto, probablemente, no ha terminado.