La victoria en 13 de las 23 provincias, el 40% del voto nacional para Cambiemos e incluso la derrota simbólica de Cristina Fernández de Kirchner (CFK) en Buenos Aires en las elecciones de ayer suponen un respaldo mayor del esperado a los planes del presidente argentino. La victoria en 13 de las 23 provincias, el 40% del voto nacional para Cambiemos e incluso la derrota simbólica de Cristina Fernández de Kirchner (CFK) en Buenos Aires en las elecciones de ayer en Argentina, han supuesto un enorme respaldo al Gobierno de Mauricio Macri, quién ahora cuenta con vía libre para llevar a cabo las reformas con las que pretende cambiar el país.
Un mensaje que él mismo ha querido enviar de forma nítida al subir en sus redes sociales un cortísimo vídeo, pero con una idea muy clara: tras los resultados de ayer, se abre un nuevo camino que «recién comienza».
— Mauricio Macri (@mauriciomacri) 23 de octubre de 2017
Y, en una conferencia de prensa en la Casa Rosada, ya había dejado claro en qué estaba pensando: «Argentina no tiene que tenerle miedo a las reformas»; y apuntó a la necesidad de reducir el déficit fiscal y avanzar en las reformas laborales y de pensiones. Además, añadió que «entramos en una etapa de reformismo permanente».
Más en concreto, sobre la cuestión del déficit Macri apuntó la intención de su Gobierno de «seguir avanzando en esta reducción gradual de déficit fiscal, que es el compromiso que asumimos desde el primer día y parte de lo que vamos a hacer a fin de año es aprobar en el Congreso un presupuesto que comprometa a que sea menor al 3,2%»; mientras que sobre la reforma laboral señaló su intención de ir negociando «sector por sector… con la industria automotriz, con la construcción, con la pesca, con la madera», así como de aumentar el peso del sector formal en la economía.
Asimismo, sobre la reforma de pensiones indicó que su intención es la de tener una propuesta antes del 2019 «que tiene que hacer el Congreso, es decir todas las fuerzas políticas para tener un sistema previsional del siglo XXI».
Pero quizá la muestra más significativa de que los resultados para Macri han sido incluso mejores de los esperados y de que éste podrá capitalizarlos en favor de sus reformas, ha sido la reacción de los mercados de renta fija y variable. Así, tras su apertura, el Merval ha subido más de un 1,4%, mientras los bonos también han operado al alza. Un resultado que si bien no es espectacular, hay que leerlo en un contexto en el que los analistas esperaban una corrección a la baja ya que la victoria de Cambiemos se daba por descontada.
