Malas noticias para el Gobierno del conservador chileno Sebastián Piñera. La ministra de Vivienda y Urbanismo, Magdalena Matte, ha presentado hoy por sorpresa su dimisión en medio de las pesquisas llevadas a cabo por la fiscalía en torno a una posible gestión ilícita de fondos públicos en un pago a una constructora que iba a denunciar a su Ministerio. Malas noticias para el Gobierno del conservador chileno Sebastián Piñera. La ministra de Vivienda y Urbanismo, Magdalena Matte, ha presentado hoy por sorpresa su dimisión en medio de las pesquisas llevadas a cabo por la fiscalía en torno a una posible gestión ilícita de fondos públicos en un pago a una constructora que iba a denunciar a su Ministerio. El anuncio se produce en el peor momento para Piñera, cuya popularidad entre los chilenos ha caído en las últimas semanas.
La propia Matte le ha comunicado su decisión en persona al presidente Piñera, en un encuentro matinal en La Moneda. La noticia ha pillado a todos por sorpresa, y al Gobierno más que a nadie, puesto que ayer la plana mayor de la política chilena oficialista había respaldado públicamente a la ministra y para hoy se esperaban actos de apoyo a la gestión de Matte al frente del Ministerio de Vivienda.
Ayer la ministra había declarado ante los fiscales encargados de investigar el caso, articulado en torno a un posible pago millonario a la constructora Kodama autorizado por Matte a través de un Decreto para evitar que la empresa denunciara al ministerio por los sobrecostes en que había incurrido desde 2006 en la construcción de una parte del Transantiago. El pago podría haberse acordado sin los necesarios antecedentes, por lo que fue paralizado por la propia ministra días después de haberse acordado, lo que despertó las sospechas de la opinión pública y la oposición.
Precisamente en la mañana de hoy, el senador del Movimiento Amplio Social (MAS), Alejandro Navarro, uno de los opositores más activos en la denuncia de las implicaciones políticas del caso, ha presentado ante la fiscalía una serie de documentos y antecedentes sobre el caso, que podrían aclarar las sombras que se ciernen sobre el pago acordado. Se espera que a lo largo de la semana la fiscalía haga públicos los primeros datos sobre la investigación.
Aunque las sospechas parecen centrarse en los asesores de la ministra, que podrían haberle engañado y ocultado información, y a pesar de que Matte había colaborado estrechamente con la justicia para esclarecer las incógnitas sobre si hubo mala gestión en la asignación de los fondos o intereses creados por alguno de sus subordinados, la oposición venía pidiendo desde hacía días la dimisión de la política, a la que han acusado reiteradamente de mala gestora.
La dimisión de Matte y el escándalo desatado podrían pasarle factura a un Sebastián Piñera cuya popularidad ha caído casi diez puntos entre los chilenos en los últimos meses.
