La nueva música portoriqueña no termina con Calle 13, ni con el reggaetón, comprometido o festero. La nueva música portoriqueña no termina con Calle 13, ni con el reggaetón, comprometido o festero.
Hay más cosas, muchas más y de alto interés. Están, por ejemplo, estos Perros de Pavlov que, en los últimos tiempos, han llamado la atención de la crítica del subcontinente.