La crisis que vive el periodismo a nivel mundial también afecta a Venezuela. Hasta tres periódicos han tenido que cerrar en el país latinoamericano por la falta de papel para imprimir. La crisis que vive el periodismo a nivel mundial también afecta a Venezuela. Hasta tres periódicos han tenido que cerrar en el país latinoamericano por la falta de papel para imprimir.
Entre los rotativos que se han visto obligados a echar el cierre, se encuentran dos decanos de la prensa del oriente venezolano: El Sol de Maturín, Estado de Monagas, y Antorcha de la población de El Tigre, en el Estado de Anzoátegui, según informa El País.
Otras cabeceras de la región, como las de los periódicos La Hora y El Caribazo del Estado de Nueva Esparta, han tenido bastantes dificultades para seguir saliendo a la calle por la falta en el suministro de papel.
En 2003, el Gobierno de Chávez impuso un régimen de control de cambios que obliga a empresas y particulares a gestionar ante oficinas del Estado el acceso a cupos de divisas.
Desde finales del año pasado, las trabas burocráticas para acceder a las divisas extranjeras, y su escasez, han provocado problemas de abastecimiento, como por ejemplo con casos como el papel higiénico o la leche en polvo, entre otros productos de primera necesidad.
Así que para importar papel de prensa se hizo necesaria la obtención de un certificado de no producción nacional, que emite el propio Gobierno con muchas tardanzas.
Los primeros que sufren esta escasez de papel son los periódicos de provincia, que suelen contar con inventarios más limitados. Fuentes citadas por El País aseguran que desde hace dos meses no entra en Venezuela ni una bobina de papel importado.
La crisis amenaza con borrar del mapa a todo un sector que, en el caso de la prensa regional, ofrece empleo a 6.000 personas. Pero, sobre todo, podría dejar sin medios de información independientes a la mayor parte del público venezolano.
