El gobierno mexicano estudia la llegada de inversiones extranjeras al país por 2.500 millones de dólares (1.751 millones de euros) durantes los próximos cuatro años con el fin de financiar proyectos turísticos. Esta inversión, que procederá principalmente de empresas españolas como Sol Meliá y Barceló, generará 20.000 puestos de trabajo directos en el sector. El gobierno mexicano estudia la llegada de inversiones extranjeras al país por 2.500 millones de dólares (1.751 millones de euros) durantes los próximos cuatro años con el fin de financiar proyectos turísticos. Esta inversión, que procederá principalmente de empresas españolas como Sol Meliá y Barceló, generará 20.000 puestos de trabajo directos en el sector.
La cifra de inversión podría verse aumentada, ya que según ha confirmado el gobierno, cuenta con otros 1.000 millones de dólares (700 millones de euros) que están en proceso de negociación. Empresas españolas, que ya tienen negocios en México, serán los principales inversores, además de alemanas y asiáticas.
Es fundamental que este desembolso económico extranjero llegue al país, ya que el turismo es la tercera fuente de ingresos de la economía nacional de México y representa el 9% del Poducto Interior Bruto (PIB) y genera, además, más de siete millones de empleos, con un efecto multiplicador en su sistema productivo.
Por ello, el gobierno mexicano, a través de la Secretaría de Turismo (SET), ha puesto en marcha este plan para impulsar la competitividad del sector. El secretario de Economía, Bruno Ferrari, y la secretaria de Turismo, Gloria Guevara, detallaron los puntos clave y avances del Acuerdo Nacional por el Turismo, firmado el pasado mes de febrero, entre el presidente mexicano, Felipe Calderón, el sector privado y los principales sindicatos para promover la industria turística.
Dentro de este plan, la nación ha elevado hasta 170 millones de dólares (118 millones de euros) las ayudas a las pymes (pequeñas y medianas empresas), de las que espera se beneficien 1.000 compañías turísticas, además de desarrollar un nuevo esquema para apoyar a las agencias de viajes que tienen dificultades para acceder a créditos bancarios.
