México destituyó hoy a su embajador en la Unesco después de que diera su voto afirmativo a un polémico proyecto de resolución sobre Jerusalén rechazado por Israel y anunció que se abstendrá en la votación definitiva. México destituyó hoy a su embajador en la Unesco después de que diera su voto afirmativo a un polémico proyecto de resolución sobre Jerusalén rechazado por Israel y anunció que se abstendrá en la votación definitiva.
«El día de mañana, en el pleno del Consejo Ejecutivo de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), el Gobierno de México anunciará su abstención en la decisión relativa a la preservación del patrimonio cultural y religioso en Jerusalén Oriental», informó la Secretaría de Relaciones Exteriores.
El apoyo de México al controvertido proyecto impulsado por países árabes generó el rechazo de la comunidad israelí en el país. El embajador Andrés Roemer se defendió diciendo que personalmente no estaba de acuerdo, pero que respondía a instrucciones de la cancillería.
En el texto, el lugar al que los musulmanes se refieren como Noble Santuario de Jerusalén (o Explanada de las Mezquitas) no se reconoce como sagrado para el judaísmo. Además se evita mencionar el nombre con el que los judíos se refieren al sitio, que es Monte del Templo.
La ministra de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu, ordenó al Órgano Interno de Control del Ministerio una «investigación pormenorizada» de lo ocurrido.
Por lo pronto a Roemer se le informó «la conclusión de su comisión como titular de la representación permanente de México ante la Unesco«.
Además, se le investigará «por no haber informado diligentemente y con acuciosidad del contexto en el que ocurrió el proceso de votación, por informar a representantes de otros gobiernos distintos al de México del sentido de su voto y por hacer públicos documentos y correspondencia oficiales sujetos al sigilo que le obliga la Ley del Servicio Exterior Mexicano».
Otros funcionarios también podrían ser sancionados. La investigación buscará «esclarecer y deslindar, con todo rigor, las responsabilidades de los funcionarios que intervinieron en este tema, específicamente en lo que toca a las instrucciones que se giraron desde México a su Representación ante la Unesco sobre el sentido del voto», se indicó en un comunicado.
México indicó que la decisión de cambiar su voto por una abstención «reitera el reconocimiento que el Gobierno de México otorga al vínculo innegable del pueblo judío con el patrimonio cultural ubicado en Jerusalén Oriental».
«Asimismo, refleja el enorme aprecio que este gobierno tiene por la comunidad judía», agregó.
Como consecuencia de la votación de la Unesco, Israel suspendió todas sus actividades con la Unesco. El Gobierno israelí considera que la Unesco tomó una decisión política con la resolución.
