Según la compañía experta en seguros de crédito, Solunion, las reformas macroeconómicas comenzarían a dar resultados positivos en los dos países. La situación macroeconómica, el entorno empresarial y la estabilidad política de Argentina y Brasil, así como sus perspectivas, se han visto mejoradas según el juicio de la compañía experta en seguros de crédito, Solunion, que a su vez recoge el portal Empresa Exterior.
A juicio de ésta, medidas del plan Macri como la supresión de los controles de capital y los recortes presupuestarios han comenzado a «reequilibrar» la economía argentina después de lastrar el crecimiento durante el pasado ejercicio.
Así, Argentina se encontraría en una situación financiera mucho más cómoda debido al renovado acceso a los mercados de capitales internacionales, y el levantamiento de las cuotas a la exportación de soja ha permitido un repunte en las exportaciones argentinas.
Además, la eliminación de las subvenciones a los precios también está teniendo un efecto positivo en la inflación ya que la nueva libertad de precios garantiza un mejor equilibrio entre la oferta y la demanda, y frena el exceso de consumo y de inversión.
Por todo ello, Solunion estima que la economía argentina crecerá un 3,2% este año, impulsada principalmente por la inversión, que se espera que aumente un 8,3% desde la recesión de 5,2% de 2016. En consecuencia, su calificación riesgo país pasa de C4 a C3.
Por su parte, Brasil pasa de C3 a B3 al prever que la inflación en 2017 bajará al 5,1%, desde el 10,7% de 2015 que ha permitido al Banco Central Brasileño reducir, por primera vez en cuatro años, su tasa de interés en 200 puntos básicos, hasta el 12,25%. También, debido a una leve subida de los precios de las materias primas, el déficit por cuenta corriente se redujo hasta el 1,1% del PIB en 2016 desde el 3,3% de 2015.
Además, la compañía de seguros de crédito considera que el consumo de las familias aumentará un 0,9% en 2017 y que la inversión crecerá un 1,9%, desde las recesiones del 5% y del 11% que registraron respectivamente en 2016. En conjunto, la economía brasileña crecería un 0,6% en 2017.
