La campaña electoral de las presidenciales brasileñas ya ha empezado en la radio y en la televisión. Finalmente, Marina Silva ha decidido dar un paso al frente y ser candidata por el Partido Socialista Brasileño (PSB). La campaña electoral de las presidenciales brasileñas ya ha empezado en la radio y en la televisión. Finalmente, Marina Silva ha decidido dar un paso al frente y ser candidata por el Partido Socialista Brasileño (PSB).
El diputado federal por Río Grande do Sul, Beto Albuquerque será el número dos de la socialista. Renata Campos, la mujer del fallecido Eduardo Campos, era otro nombre que se barajaba, y Albuquerque se puso a su entera disposición.
En Brasil, la propaganda electoral tiene un peso decisivo. El PSB parece saberlo y por ello ha respetado los anuncios que grabó Campos, rodeado de su familia y de sus votantes. Mientras que la presidenta Dilma Rousseff del Partido de los Trabajadores (PT) y el aspirante del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), Aécio Neves, han tenido también un recuerdo para el político fallecido.
Al menos en el tiempo de aparición en pantalla, Rousseff es la ganadora con 11 minutos y 24 segundos frente los cuatro minutos y 35 segundos de Neves. Aunque el tiempo no es siempre decisivo, en 2010 Marina Silva con su minuto y 23 segundos se hizo con 20 millones de votos.