El Gobierno y los sindicatos se han enzarzado en una guerra de cifras sobre el seguimiento de la huelga general convocada para este jueves contra la política económica de Cristina Fernández. El Ejecutivo asegura que el 75% ha obviado el paro, mientras que los gremios dice que el 80% se ha ausentado. El Gobierno y los sindicatos argentinos se han enzarzado en una guerra de cifras sobre el seguimiento de la huelga general convocada para este jueves contra la política económica de Cristina Fernández de Kirchner. El Ejecutivo asegura que el 75% de los empleados ha obviado el paro, mientras que los gremios dicen que el 80% se ha ausentado de sus trabajos.
El líder de la Confederación General del Trabajo (CGT) Hugo Moyano ha asegurado que «el acatamiento del paro es del 80%». «Las cifras del Gobierno no tienen nada que ver con la realidad», ha enfatizado, de acuerdo con el diario argentino Clarín, recogido por Europa Press.
Por su parte, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich ha dicho que «Hay 20 gremios, que cuentan con más de 30.000 afiliados, que efectivamente no se adhieren, y solo 8 que manifestaron su adhesión», para después indicar que «el 75% de los trabajadores manifestó su voluntad de trabajar».
Sobre el funcionamiento de los servicios públicos, Capitanich ha señalado que «se ha observado el funcionamiento de las líneas de transporte urbano e interurbano, así como del ‘subte’, a excepción de la línea B».
Además, ha reiterado que, aunque «el Gobierno es respetuoso del derecho a la huelga, no se dan ni las circunstancias, ni el momento, ni la oportunidad». «Aceptamos las disidencias aún cuando no los compartimos», ha subrayado.
Capitanich ha insistido en que «no hay justificación de una medida de fuerza de esta naturaleza», remarcando que «es de naturaleza política y responde solamente al arco opositor», según ha informado la agencia de noticias oficial Télam.
