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Los resultados registrados en Congreso y Senado ofrecen un panorama difuso de alianzas, mucho más complejo que en la actualidad

Los resultados en las legislativas extienden la incertidumbre sobre Chile

Urna electoral

No sólo los resultados de la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Chile celebradas ayer han resultado más inciertos de lo esperado; también las elecciones legislativas ofrecen un panorama difuso de alianzas que, en todo caso, serán significativamente más complejas y diversas. No sólo los resultados de la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Chile celebradas ayer han resultado más inciertos de lo esperado; también las elecciones legislativas ofrecen un panorama difuso de alianzas que, en todo caso, serán significativamente más complejas y diversas que las existentes hasta ahora.

El primer factor de dificultad se produce ya que, en términos de espectro ideológico o de bloques de izquierda versus derecha, los partidos que han obtenido mayor número de representantes no correponden con el candidato presidencial con mayor apoyo en la mencionda primera vuelta de las presidenciales.

De esta forma, se da la situación de que mientras que, quien pese a todo parte como favorito de cara a hacerse con la Presidencia en la segunda vuelta, el multimillonario y expresidente Sebastián Piñera, defiende un programa de Gobierno de ideología conservadora; las Cámaras chilenas ofrecen un dominio legislativo de las fuerzas situadas entre el centroizquierda y la izquierda.

Pero, además, el reparto entre dichas fuerzas es mucho más difuso del que existía hasta ahora y ofrece una mayor polarización ente las diferentes fuerzas. Así, los partidos que han apoyado al Gobierno de Michelle Bachelet, considerados fuerzas más tradicionales, han perdido terreno; mientras que el Frente Amplio, más rupturista, ha ampliado sus resultados exponencialmente.

Y es que esta última coalición que agrupa a formaciones como Revolución Democrática, Partido Liberal, Partido Humanista, Partido Ecologista Verde, o Igualdad y Poder; mantenía tres diputados en la actual legislatura, mientras que, ahora, ha multiplicado por siete su resultado, y a partir de marzo en que tomará posesión la nueva Cámara Baja,contará con 21 legisladores, un 14 % del total.

Sin duda, ha influido que, por primera vez, los comicios legislativos se desarrollaron en aplicación de la nueva ley electoral que ha puesto fin al polémico sistema anterior, conocido como binominal. Se ha dado así paso a un criterio de reparto más proporcional, basado en la llamada Ley d’Hondt. Además, el nuevo Parlamento pasará de 120 miembros a 155.

Algo que ha propiciado la emergencia de formaciones, hasta ahora, más pequeñas en detrimento de los dos grandes bloques que históricamente han dominado el Congreso chileno: derecha y centro izquierda. O en realidad, en esta ocasión, sobre todo, ha lastrado a estos últimos.

Así, las fuerzas que hasta ahora componían la Nueva Mayoría (compuesta por el Partido Comunista (PC), el Partido por la Democracia (PPD), el Partido Radical Socialdemócrata (PRSD), el Partido Socialista (PS) y la Democracia Cristiana (DC)) han pasado de 61 parlamentarios, el 51% del actual Congreso, a 57. 4 escaños menos, pero una disminución de 14 puntos porcentuales en el porcentaje que supondrá su representación en la nueva Cámara dada su ampliación.

Además, en ese nuevo 37% que sería el que aglutinarían las fuerzas de la Nueva Mayoría, hay que tener en cuenta que se incluirían los 14 diputados de la Democracia Cristiana, que en la próxima legislatura quedará desgajada de esa actual coalición de Gobierno.

Por el contrario, las fuerzas coaligadas en torno a Vamos, formada por los partidos Evolución Política (Evópoli), Regionalista Independiente, Renovación Nacional (RN) y Unión Demócrata Independiente (UDI) tendrá en total 71 parlamentarios. Es decir, los partidos que apoyan a Piñera, frente al 35,8% que tienen en la actualidad; suben hasta el 46% de los diputados, pero tampoco lo suficiente como para llegar a la mayoría.

Senado

Respecto al Senado, que renovó 25 de sus 38 escaños, Chile Vamos también figura como gran ganador en términos relativos; pero una vez más es una victoria insuficiente. Y es que si bien en este momento cuenta con 13 parlamentarios, de un total de 38 y en marzo sumará 19, éstos suponen tan sólo un 44,1% del total.

Por su parte, la Nueva Mayoría, que actualmente representa el 49,8% de la Cámara Alta, con 19 parlamentarios; se quedará en marzo con 21, el 48,8%.

Por último, el Frente Amplio pasará de no tener ningún representante en la Cámara Alta, a tener uno.

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