Los profesores mexicanos del estado de Guerrero no tienen intención de detener sus protestas una vez han roto su diálogo con el gobernador del estado, Ángel Aguirre y piensan recurrir al presidente, Enrique Peña Nieto para intentar llegar a un acuerdo. Los profesores mexicanos del estado de Guerrero no tienen intención de detener sus protestas una vez han roto su diálogo con el gobernador del estado, Ángel Aguirre y piensan recurrir al presidente, Enrique Peña Nieto para intentar llegar a un acuerdo.
Comentan estos docentes que la reforma educativa no hace más que vulnerar sus derechos ya abrir la puerta a la privatización de la enseñanza. En una conversación con El País, el líder de los profesores, Román López, ha señalado que pondrán toda la carne en el asador y que el diálogo va a pasar a cotas nacionales.
La contienda parece que va para largo y alcanzó su punto más caliente la semana pasada, cuando diversos grupos de encapuchados llevaron a cabo una “batalla campal” en Chilpancingo, cercaron el Congreso estatal, incendiaron sedes de partidos políticos y bloquearon carreteras.
Lo que algunos tildaron de pasividad por parte del Gobierno (no detuvieron a nadie por esta movilización) tuvo como respuesta que el Gobierno de Peña Nieto anunciase el envío de agentes federales. A pesar de ello y del eco mediático del conflicto, López ha asegurado que cuentan “con la simpatía de la gente”.