Acusan a los ejecutivos presididos por Mauricio Macri y Michel Temer de impedir el desarrollo normal de las investigaciones relacionados con el escándalo de corrupción en torno al gigante de la construcción brasileña Odebrecht. Los procuradores generales de Argentina y Brasil, Alejandra Gils y Rodrigo Janot, respectivamente, han publicado hoy un duro comunicado contra los Gobiernos de ambos países. En éste, acusan a los ejecutivos presididos por Mauricio Macri y Michel Temer de impedir el desarrollo normal de las investigaciones relacionados con el escándalo de corrupción en torno al gigante de la construcción brasileña Odebrecht que involucra a éste en el pago de sobornos a políticos y funcionarios públicos de toda América Latina a cambio de la concesión de obras públicas.
«Advertimos que las autoridades centrales en materia de cooperación jurídica internacional de ambos países -Ministerio de Justicia de Brasil y Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto de Argentina-, presentan obstáculos y requerimientos que constituyen injerencias indebidas en el desarrollo de los acuerdos que en materia de investigación del caso Odebrecht realizaron los Ministerios Públicos de Brasil y Argentina», cita un comunicado conjunto de los dos fiscales subido al sitio oficial de Procuración, del que se hace eco Ámbito.com.
Los dos procuradores generales, figura de alto cargo de Justicia similar a la de Fiscal General del Estado en España, consideran que los Gobiernos de sus países estarían manipulando la forma de acogerse a instrumentos internacionales de cooperación para intervenir y dilatar la investigación e instrucción judicial.
Así, señalan que en el caso del Ministerio de Justicia brasileño, éste incluso habría exigido una intervención directa en la redacción del Acuerdo de Constitución del Equipo Conjunto de Investigación (ECI), orientada, según el criterio de los procuradores, fundamentalmente, a que las pruebas compartidas en ese marco de cooperación sean «tramitadas por las autoridades centrales».
Mientras que en el caso de Argentina, Janot y Gills señalan que la Cancillería propuso convertir el Equipo Conjunto de Investigación en un tratado internacional negociado por los Poderes Ejecutivos. «Ambas solicitudes desvirtúan la herramienta de cooperación entre los órganos judiciales competentes para la investigación», señalaron en la misiva.
Una situación de ‘acosa’ ante la que ambos procuradores señalan que ambos Ministerios Públicos continuarán invirtiendo sus mejores esfuerzos y recursos para la investigación del caso Odebrecht; al tiempo que solicitan a sus Gobiernos que «resuelvan de manera urgente los obstáculos impuestos».
