Argentina comienza a labrarse una imagen consolidada de país que impone numerosas trabajas al comercio y a las importaciones, para proteger su mercado interior. Después de un largo contencioso con Brasil por ese motivo, Paraguay ha tomado medidas contra la nación de Cristina Fernández. Su delegación en el Mercosur ha denunciado ante el Parlamento del organismo supranacional que el país argentino viola sistemáticamente los tratados de comercio y convenios que regulan los intercambios entre ambos territorios, lo que perjudica a los productos paraguayos. Argentina comienza a labrarse una imagen consolidada de país que impone numerosas trabajas al comercio y a las importaciones, para proteger su mercado interior. Después de un largo contencioso con Brasil por ese motivo, Paraguay ha tomado medidas contra la nación de Cristina Fernández. Su delegación en el Mercosur ha denunciado ante el Parlamento del organismo supranacional que el país argentino viola sistemáticamente los tratados de comercio y convenios que regulan los intercambios entre ambos territorios, lo que perjudica a los productos paraguayos.
El Parlamento del Mercosur, más conocido como PARLASUR, ha recibido las quejas paraguayas, que sostienen que Argentina se comporta en «permanente incumplimiento del Tratado de Asunción», el documento que dio origen al propio Mercosur y que debería garantizar el tránsito de las mercancías entre los países miembros. Además, la delegación paraguaya ha cargado contra “el recrudecimiento de las medidas de fuerza impulsadas por las organizaciones sindicales argentinas», que, acusa, está afectando gravemente a los barcos que toman tierra en Argentina con mercancías paraguayas.
Además, Argentina podría estar impidiendo el libre tránsito de energía desde Paraguay a Uruguay, como ha denunciado Ricardo Canese, miembro de la delegación paraguaya en el PARLASUR. «Vamos a exigir que se pronuncie el Parlasur por el libre tránsito de la energía paraguaya a Uruguay. Argentina está poniendo trabas contrarias al Tratado de Asunción, que también estipula el libre tránsito», ha declarado a los medios Canese, que también ha indicado que Argentina podría estar valorando la idea de imponer una tasa a la energía que pasa por su territorio.
Las pérdidas que sufre Paraguay por ese comportamiento ascienden a «alrededor de 40 millones de dólares anuales», como ha subrayado la delegación. No es la primera vez que Argentina sufre las iras de un vecino. En los últimos meses, la nación de Cristina Fernández ha mantenido una guerra comercial con Brasil, que había protestado por las trabas a los productos brasileños que se imponían en el mercado argentino.
