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Los fondos de EEUU, contra los planes de Enel para Endesa en Chile

Los planes de la italiana Enel para su filial Endesa en Chile vuelven a tropezar. Los fondos estadounidenses podrían poner en apuros un polémico proyecto que este mismo jueves debe aprobarse en junta de accionistas. Los ‘yanquis’ han decidido guardarse para sí el derecho a voto sobre la propuesta de la eléctrica en lugar de entregárselo como cheque en blanco a la directiva del grupo. Los planes de la italiana Enel para su filial Endesa en Chile vuelven a tropezar. Los fondos estadounidenses podrían poner en apuros un polémico proyecto que este mismo jueves debe aprobarse en junta de accionistas. Los ‘yanquis’ han decidido guardarse para sí el derecho a voto sobre la propuesta de la eléctrica en lugar de entregárselo como cheque en blanco a la directiva del grupo.

BlackRock, Acadian, Mondrian, The Vanguard Group y American Funds son algunos de los nombres que podrían estar tras la nueva piedra en el camino de Enel. Todos estos fondos son accionistas de Enersis -que es el nombre de Endesa Chile- a través de las conocidas ADR mediante las cuales una compañía extranjera puede cotizar en Wall Street. Muchos de estos inversores institucionales tienen designada a Citi como entidad depositaria de sus títulos y ha sido a ésta a quien ha correspondido anunciar que “no otorgará al presidente del directorio [de la cotizada chilena] el voto discrecional de aquellos tenedores que no hayan expresado intención de voto” a escasas horas de la decisiva reunión.

Los expertos señalan que la entrega del voto al presidente de Enersis se hubiera interpretado como un cheque en blanco a los planes de la matriz italiana. Algo que, sin embargo, no ha sucedido. En este sentido, destacan algunos se podría entender el interés que las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) de Chile tenían hace unas semanas por saber cómo podrían ejercer su voto los tenedores de ADR en Nueva York. De hecho, estos fondos chilenos fueron -hasta ayer mismo- la principal voz en contra de la hoja de ruta trazada por Enel, al punto de forzar a la eléctrica a su rediseño en más de una ocasión.

Por el momento, no ha trascendido qué porcentaje del accionariado de Enersis representan estos ‘yanquis’ indecisos que han vuelto a poner contra las cuerdas la ambiciosa y polémica ampliación de capital de la marca chilena de Enel. Sin embargo, lo que sí se sabe es que son necesarios los votos favorables de al menos dos tercios del capital de la cotizada para proceder con un proyecto que pretende convertir a la chilena en un gran holding energético para Latinoamérica.

Aunque con el acuerdo de las AFP el proyecto parece asegurado, tras duras negociaciones, el rechazo de los fondos estadounidenses podría suponer un duro varapalo al plan, ya que una buena parte de la ampliación de capital quedaría pendiente de un hilo. Y es que, es necesario que los accionistas de Enersis acudan a la operación para evitar que Endesa, dispuesta a cubrir toda su parte con su cartera de participadas en Latinoamérica, ha supeditado todo el proceso a que una vez cerrado no supere en ningún caso el 65% del capital de su filial. Un umbral que forzaría por ley la salida de los fondos de pensiones y rompería la estabilidad accionarial de la firma.

Cuando solo faltan unas horas para que se apruebe o se dé carpetazo final al proyecto en Enersis, para bien o desgracia de Enel respectivamente, todas las quinielas parecen seguir abiertas. Por lo pronto, la valoración definitiva que se propondrá en la junta para los activos con los que la italiana cubrirá su parte de la ampliación sin desprenderse de un solo euro en efectivo, ha quedado muy por debajo de lo que inicialmente había anunciado la eléctrica.

Enel Green Power

Otra de las condiciones que los fondos de pensiones chilenos impusieron para dar su visto bueno a la operación, compromiso que lograron arrancar a Enel hace unas semanas, era que Enersis se convirtiese de ahora en adelante en el único vehículo inversor de Enel en Latinoamérica en energías tradicionales. Mientras tanto, la marca ‘verde’ Enel Green Power seguiría su desarrollo en paralelo.

Con estas premisas, la renovable se ha hecho hoy con un préstamo de 58 millones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para desarrollar uno de sus más grandes proyectos eólicos en México que se adjudicó recientemente. Las acciones de Enel Green Power cotizadas en Madrid se apuntaban al calor de esta noticia y a media sesión bursátil alzas de hasta el 4,5% con un volumen muy superior a su media anual. En Nueva York, los ADR de Enersis, cuyos tenedores tienen en su mano buena parte del éxito o fracaso de la polémica operación, cedían un 0,4% en los primeros cruces de la sesión.

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