Los precios van a subir en Cuba. Sí o sí. Esta es la conclusión de múltiples observadores que interpretan en esta clave dos de las últimas decisiones adoptadas por La Habana a las que, por cierto, no se les ha dado publicidad alguna. Los precios van a subir en Cuba. Sí o sí. Esta es la conclusión de múltiples observadores que interpretan en esta clave dos de las últimas decisiones adoptadas por La Habana a las que, por cierto, no se les ha dado publicidad alguna.
Primero, la creación de una empresa específica que se encargara de establecer una red de ventas mayorista para nutrir al sector privado y después la decisión de aplicar alzas al precio de muchos de los productos que se comercializarán por esta vía.
Tal vez sea un nuevo signo de normalización de la Isla y su avance lento hacía la economía de mercado, el hecho de que el pagador final de las subidas sea el consumidor. Lo mismo que en los otros países del mundo, por supuesto. Sólo que en otros la situación de la clientela quizá sea más desahogada.
Lo cierto es que, según explica el portal de Miami ‘Café Fuerte’, la creación de la Empresa Comecializadora Mayorista de Productos Alimenticios, Industriales y otros Bienes de Consumo, por medio de la resolución 52/2013 del Ministerio de Comerico sí se anunció en los medios oficiales. Pero nada se ha dicho de las subidas de precios.
Afectan especialmente a los alimentos y comprenden incrementos de entre el 40% y el 65%, para productos como el kétchup, la salsa y el jugo de tomate, las conservas vegetales, el puré de mango y varias frutas.
