La televisión de pago perfila como uno de los negocios en auge de Brasil y las empresas de telecomunicaciones presentes en el país, como la española Telefónica o sus rivales América Móvil y Oi, serán los grandes beneficiados. La televisión de pago perfila como uno de los negocios en auge de Brasil y las empresas de telecomunicaciones presentes en el país, como la española Telefónica o sus rivales América Móvil y Oi, serán los grandes beneficiados.
En apenas diez años, se espera que un 80% de los hogares tengan contratado un servicio de televisión de pago, tanto por satélite como por cable, frente al 24% de los 55 millones de casas que lo tienen actualmente, según Joao Batista de Rezende, presidente de Anatel, el regulador de telecomunicaciones brasileño.
La expansión de la clase media y las nuevas regulaciones aprobadas, junto con los bajos precios y el crecimiento de la oferta, alimentarán este incremento, a juicio del regulador. Telefónica, América Móvil y Oi ya ofrecen servicios de televisión por satélite en Brasil, y se espera que ahora den el paso al cable después de que una ley aprobada el año pasado les permitiese introducirse en este negocio.
“Con la reducción de costes tecnológicos, la posibilidad de exenciones fiscales para el equipamiento, y el crecimiento de los ingresos, hay varios factores positivos que impulsan el proceso”, dijo Rezende en una entrevista telefónica concedida a Bloomberg.
El Gobierno de Brasil publicó nuevas regulaciones sobre la televisión por cable y por satélite, así como respecto al video por Internet en el Boletín Oficial Federal del 28 de marzo. Con ese paso, Anatel puede avanzar este mes en la aprobación de las 600 solicitudes de licencias que se le han presentado, algunas por casi 10 años.
