El anuncio que hizo Felipe Calderón hace unos días de que planea impulsar una reforma de la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) para abrirla a la iniciativa privada ha desatado una riada de críticas entre sus opositores. Le acusan de no haber consensuado ningún proyecto con el resto de fuerzas políticas ni con legisladores. El proyecto no está definido ni Calderón ofreció detalles concretos de cómo se llevaría a cabo. El anuncio que hizo Felipe Calderón hace unos días de que planea impulsar una reforma de la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) para abrirla a la iniciativa privada ha desatado una riada de críticas entre sus opositores. Le acusan de no haber consensuado ningún proyecto con el resto de fuerzas políticas ni con legisladores. El proyecto no está definido ni Calderón ofreció detalles concretos de cómo se llevaría a cabo.
“Que lo revisemos, sería importante. Sacar una propuesta así al vapor o banquetera, no. Tendríamos que sentarnos. Creo que el Presidente tendría que convocarnos a revisar cuál es la iniciativa y escuchar las propuestas de otros grupos, Pero sí, para siempre con la mira en avanzar”, ha declarado Humberto Moreira, dirigente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El modelo que está en el aire es el aplicado en Brasil con Petrobras, y que ha dado buen resultado hasta el momento. Sin embargo, el anuncio de Calderón, a pesar de su falta de consistencia y de detalles, ha provocado la efervescencia del panorama político mexicano, que exige explicaciones y reuniones consensuadas en torno a cualquier decisión que se tome con respecto a Pemex.
Francisco Rojas, coordinador del PRI en la Cámara de Diputados, ha señalado que la política energética del gobierno del Partido Acción Nacional (PAN) de Calderón ha sido contraproducente para la petrolera, puesto que, afirma, la producción ha perdido 800.000 barriles de petróleo diarios desde que tomó el poder.
La clave está en que una reforma del funcionamiento interno de Pemex o de la apertura a la inversión privada requeriría cambios en la Constitución mexicana, lo que hace que el tema caldee el panorama político.
