Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

La Habana aprueba desgravaciones fiscales para los ‘cuentapropistas’ a partir del 1 de enero

La Habana continúa con sus reformas económicas. Sin ir más lejos, el Gobierno de Raúl Castro ha decidido mantener la desgravación de escala decreciente a los nuevos emprendedores y además ha añadido nuevos impuestos y gravámenes que deberán cumplir los ‘cuentapropistas’. La Habana continúa con sus reformas económicas. Sin ir más lejos, el Gobierno de Raúl Castro ha decidido mantener la desgravación de escala decreciente a los nuevos emprendedores y además ha añadido nuevos impuestos y gravámenes que deberán cumplir los ‘cuentapropistas’.

En concreto, la desgravación que se mantiene y data del años 1994, va del 15% para los ingresos superiores a 10.000 pesos (alrededor de 400 dólares) al año, al 50% de los ingresos de más de 50.000 pesos (2.000 dólares) e incluirá nuevas deducciones para incentivar el trabajo.

Así, los agricultores pueden deducir hasta el 70% de los ingresos como costos, y los pequeños empresarios (que tributan por ingresos y no por ganancias) hasta un 40%, más varios cargos e impuestos secundarios que pagan.

Por otro lado, el impuesto sobre el trabajo de un 20% (otro impuesto antiguo) se reducirá gradualmente hasta el 5% para el 2017, y las pequeñas empresas con cinco empleados o menos estarán exentas de pagarlo. Además, eventualmente todos los trabajadores pagarán impuestos sobre la renta, así como un nuevo impuesto sobre la propiedad de un 2%, pero ambas medidas están suspendidas hasta que “las condiciones permitan” que entren en vigor.

Aunque no es la única novedad para los cubanos, una modificación de la legislación cubana hará que los isleños, que apenas han pagado impuestos durante medio siglo, tengan que hacerlo a partir del uno de enero de 2013.

Esta nueva regulación supone la primera tributación integral de Cuba desde que la revolución de 1959 abolió casi todos los impuestos. En los 90, tras la caída de la Unión Soviética, principal benefactor del país, el Gobierno incluyó algunos gravámenes dispersos, pero prefirió mantener los sueldos bajos para garantizas servicios sociales gratuitos.

En los dos últimos años, las reformas del libre mercado que ha introducido el Gobierno han estado diseñadas para fomentar las pequeñas empresas, la agricultura privada y la iniciativa individual, junto a los planes para pagar más a los trabajadores. Lo que primará en esta ocasión será (como apuntan los medios internacionales) obtener ganancias.

En concreto, el nuevo código cuenta con 19 impuestos que incluyen cambios en: herencias, medio ambiente, ventas, transporte, explotación agrícola, pagos de licencias y contribuciones, entre las que destaca la seguridad social.

Esto supone, según Domingo Amuchastegui, un ex analista de inteligencia cubana que vive en Miami y escribe con frecuencia acerca de Cuba, “un cambio radical en la relación del Estado con la población y los impuestos se convertirán en un problema irritante”.

Más información

Scroll al inicio