Hugo Chávez será una vez más presidente de Venezuela, esta vez sin ceremonia de toma de posesión. Así lo ha avalado este miércoles el Tribunal Supremo del país caribeño al justificar que el mandatario, retirado a La Habana donde está siendo tratado de la enfermedad que padece, no tiene que cumplir esta formalidad por ser un gobernante “reelecto”.
Hugo Chávez será una vez más presidente de Venezuela, esta vez sin ceremonia de toma de posesión. Así lo ha avalado este miércoles el Tribunal Supremo del país caribeño al justificar que el mandatario, retirado a La Habana donde está siendo tratado de la enfermedad que padece, no tiene que cumplir esta formalidad por ser un gobernante “reelecto”.
La presidenta del Supremo venezolano, Luisa Estella Morales, ha justificado el fallo del máximo órgano judicial porque “a pesar de que el 10 de enero se inicia un nuevo periodo constitucional” la condición de “presidente reelecto” de Hugo Chávez hace que no sea necesaria una nueva toma de posesión, sino que se da continuidad a la última en que el líder bolivariano fue protagonista. “Es un presidente con una gestión aprobada por el [pueblo] soberano”, agregó.
Con esta decisión se da plena facultad al actual Gobierno de Venezuela para que continúe en el ejercicio de sus funciones más allá de mañana jueves, si bien el juramento formal de Chávez queda pospuesto para más adelante. “El poder ejecutivo constituido por el presidente, vicepresidente, los ministros y demás órganos y funcionarios de la Administración seguirá ejerciendo cabalmente sus funciones con fundamento en el principio de la continuidad administrativa”, indicó la magistrada.
En los últimos días mucho se había especulado sobre el futuro político del país si Chávez, debido a su delicado estado de salud, no acudía a la cita de mañana. Con el dictamen favorable de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo venezolano, la vida política del país sigue el guión marcado por el chavismo a la espera de que su líder regrese de tierras cubanas, ausencia para la que contó con el beneplácito de la Asamblea Nacional.
