La Secretaría de Hacienda de México ha recortado el pronóstico de crecimiento de este año para la economía del país desde un rango comprendido entre 2,6% y el 3,6% a uno que va desde el 2,2% al 3,2%. La Secretaría de Hacienda de México ha recortado el pronóstico de crecimiento de este año para la economía del país desde un rango comprendido entre 2,6% y el 3,6% a uno que va desde el 2,2% al 3,2%.
El entorno global adverso y el titubeante sector industrial estadounidense son algunas de las razones que esgrime el Ejecutivo de Enrique Peña Nieto para haber bajado la estimación de crecimiento. Con las cifras ha coincidido el último informe de Moody´s que espera avances de entre el 2% y el 3%.
Tal y como recoge Expansión de México, el director de Moody´s Analytics para Latinoamérica, Alfredo Coutiño, “para crecer más de lo que ya lo ha hecho en el primer trimestre (2,8%) necesitaría mayor déficit fiscal y una política monetaria expansiva, lo que generaría distorsiones”.
Igualmente, desde su punto de vista, sería necesario que el sector privado aumentase la inversión productiva mientras que el Gobierno moderniza y genera nuevas infraestructuras. Esta recomendación no está en línea con el último ajuste a la inversión de 13.227 millones de pesos (unos 720 millones de dólares) entre los que destaca la paralización de varios proyectos de infraestructuras.
