El Banco de Bogotá y el banco japonés Sumitomo Mitsui han formalizado una alianza mediante la cual las dos entidades financieras operarán en nuevos negocios en Asia y América Latina. La alianza implicará el apoyo financiero a empresarios de una y otra región para fortalecer sus operaciones en los dos mercados. El colombiano Banco de Bogotá y el banco japonés Sumitomo Mitsui han formalizado una alianza mediante la cual las dos entidades financieras operarán en nuevos negocios en Asia y América Latina. La alianza implicará el apoyo financiero a empresarios de una y otra región para fortalecer sus operaciones en los dos mercados.
Con esta alianza, el banco colombiano podrá comenzar a actuar en Asia. Germán Salazar, vicepresidente internacional del Banco de Bogotá, dijo que el acuerdo firmado con la entidad japonesa implica una cooperación mutua en el apoyo de negocios entre Asia y la región Andina. Habrá incluso operaciones con los países centroamericanos, gracias a la compra del BAC Credomatic.
“Esta es la primera parte de un acuerdo ambicioso, que va a trabajar en diferentes campos como el de financiación de infraestructura», agregó Salazar, quien además explicó que las entidades podrán desarrollar créditos sindicados para empresas.
«Inicialmente hemos visto que hay grandes empresas asiáticas, japonesas especialmente, interesadas en entrar a Colombia en temas de infraestructura y necesitan bancos que ayuden a los cierres financieros con un componente local», explicó de esta forma Salazar el interés del banco japonés por invertir en Colombia.
El presidente del Banco de Bogotá, Alejandro Figueroa, ha señalado la alta confianza que existe entre los inversores internacionales a la hora de invertir en Colombia. Pero aparte del interés japonés por el país andino, también hay que destacar el interés del gobierno de Santos por facilitar a empresarios nacionales a invertir en tierras asiáticas.
Los dos bancos comparten intereses comunes por expandirse fuera de sus fronteras. El banco Sumitomo Mitsui, fundado en 1876, es un de los bancos asiáticos más internacionalizado, mientras que el Banco de Bogotá busca seguir la senda recorrida por el japonés después de haber adquirido el BAC Credomatic, aunque esta adquisición sólo le valga para expandirse por Centroamérica.
