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Duhalde y la delincuencia de Buenos Aires complican el futuro político de Cristina Fernández

La mandataria argentina Cristina Fernández, que aspira a ser reelegida en 2011, se enfrenta ahora a dos amenazas que pueden complicar su futuro: el regreso de Eduardo Duhalde, el más duro rival político con el que ha tenido que lidiar la familia Kirchner y un estallido de violencia en el conurbano de Buenos Aires. La mandataria argentina Cristina Fernández, que aspira a ser reelegida en 2011, se enfrenta ahora a dos amenazas que pueden complicar su futuro: el regreso de Eduardo Duhalde, el más duro rival político con el que ha tenido que lidiar la familia Kirchner y un estallido de violencia en el conurbano de Buenos Aires.

La respuesta a la precandidatura de Duhalde al Partido Justicialista no se ha hecho esperar. Cristina ha lanzado contra él al canciller Héctor Timerman, que ha señalado que Duhalde “promueve la represión entre los grupos sociales” en lugar de “buscar una negociación aunque lleve más tiempo”, y al ministro del Interior, Florencio Randazzo, que ha asegurado que el ex mandatario «tiene una visión diferente de lo que es ordenar el país».

Ambos hacían referencia a las palabras de Duhalde en su discurso de presentación de precandidatura. «No tengan miedo de hablar de represión, que no es matar a nadie, sino vivir en un país donde el Estado tiene funciones indelegables», aseguró el ex presidente, a quien el Gobierno señala como instigador de los incidentes por la toma de tierras, por parte de miembros desfavorecidos de la sociedad, en Villa Soldati y en Lugano, cinturón urbano de Buenos Aires.

Cristina Fernández, que aun no ha confirmado su candidatura a liderar el Partido Judicialista pero que cuenta con un masivo apoyo social de cara a las elecciones de 2011, se esfuerza estos días por hacer frente a la delincuencia en esa zona de la capital, principal preocupación de los argentinos junto con la inflación. Para combatir tanto la toma de tierras como la elevada tasa de delitos en el conurbano de Buenos Aires, el Gobierno ha desplegado 6.000 gendarmes que vienen a apoyar a los 3.000 ya existentes.

La presidenta dio ayer inicio a la que se ha dado en llamar “Operación Centinela”. El conurbano bonaerense concentra casi el 40% de la población del país, según ha asegurado Fernández, que ha creado un Ministerio de Seguridad, cuya titular, la ex ministra de Defensa Nilda Garré, criticó que algunos «sectores» estaban «interesados» en potenciar la situación que vive el país con respecto a la toma de terrenos, según informó la agencia oficial Télam, en lo que puede entenderse como una referencia a precandidato Duhalde.

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