Se trata de un nuevo hito en la operación Lava Jato que remueve los cimientos de la vida política del país carioca. Eike Batista, el que fuera el hombre más rico de Brasil, y el séptimo en el mundo, ha sido detenido en relación con la operación que ha conmovido los cimientos de la vida política del país carioca: la operación Lava Jato.
En concreto, la acusación es la de haber participado en la simulación de la venta de una mina de oro y transferir 16,5 millones de dólares a la cuenta del ex gobernador de Río, Sergio Cabral, quien ya se encuentra en prisión desde noviembre del año pasado.
Una complicada operación que habría servido para el lavado de dinero. Pero estas acusaciones de corrupción no son tampoco las prieras que recaen sobre Batista a quien en 2014 ya se le inición un juicio por uso de información privilegiada.
Al empresario se lo acusa de usar información para vender las acciones de su petrolera OGX antes de que quebrase. Dicho juicio aún continúa y ahora se le suma la imputación por cargos de corrupción en el mencionado caso de lavado.
Según el listado de la revista Forbes, en 2012 era el séptimo hombre más rico del mundo, con una fortuna estimada de 35.000 millones de dólares que tras el derrumbe de EBX por un colapso de la demanda de materias primas habría caído a menos de 1.000.
EBX se dedica esencialmente a la minería, la explotación del petróleo, la construcción naval y la logística.
