La presidenta argentina, Cristina F. de Kirchner ha movido fichas en los sindicatos. Tras la división en dos de la Confederación General de Trabajadores (CGT), el grupo que se posicionó contra el anterior secretario general, Hugo Moyano, ha cerrado filas en torno a su propio líder, el metalúrgico Antonio Caló. La presidenta argentina, Cristina F. de Kirchner ha movido fichas en los sindicatos. Tras la división en dos de la Confederación General de Trabajadores (CGT), el grupo que se posicionó contra el anterior secretario general, Hugo Moyano, ha cerrado filas en torno a su propio líder, el metalúrgico Antonio Caló.
El sindicalista se ha ganado el apoyo unánime de toda la CGT disidente tras haber manifestado que para presentar formalmente su candidatura para convertirse en líder del gremio. Aunque aún es pronto para echar las campanas al vuelo, puesto que puede haber sorpresas en la elección del tres de octubre.
Muchos dan a Caló como ganador en las elecciones a secretario de la CGT, como el dirigente del sector de los Gordos, Héctor Daer que considera que Antonio Caló es “el único candidato que hay”.
Caló ha sido el único antimoyanista que ha mostrado su interés por ser jefe del gremio y cuenta con algunas ventajas que lo colocan mejor que cualquier otro: el respaldo de la Unión Obrera Metalúrgica.
A pesar de ello, aún no está todo dicho. Pues, pese a lo que dice la prensa oficial, son muchos los medios que apuntan que el gran apoyo a este candidato se debe, precisamente, a que es el único que se ha presentado, lo que crea resistencias en muchos de los gremios que no apoyan a Hugo Moyano.
Otra pregunta que sobrevuela este sindicato es quien sería el número dos de Antonio Caló de ser elegido secretario de la CGT. Quien parecía tener en puesto en el bolsillo era Omar Viviani, que ahora, según apuntan los medios argentinos, se perfila como su principal rival.
Esta CGT se opone a la de Moyano y se ha posicionado del lado del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, de ahí que cuanto el ministerio de Trabajo tomase la decisión de anular las elecciones de Hugo Moyano, diese luz verde a una nueva elección de este floreciente grupo. Además, parece ser que Caló está dentro del modelo que gusta en la Casa Rosada.
Mientras, los moyanistas han vuelto a amanerar con nuevos paros nacionales. En esta ocasión el sector en conflicto tiene que ver con la recolección de residuos y una protesta contra el despido de 400 trabajadores por rescisión de contrato entre el municipio bonarense de Quilmes y la empresa Covelia.
