El líder opositor Henrique Capriles ha asegurado que convocará una manifestación “pacífica” para quejarse contra la violencia y la escasez de insumos en Venezuela. Capriles ha exigido también iniciar una investigación sobre las movilizaciones del 12 de febrero en Caracas. El líder opositor Henrique Capriles ha asegurado que convocará una manifestación “pacífica” para quejarse contra la violencia y la escasez de insumos en Venezuela. Capriles ha exigido también iniciar una investigación sobre las movilizaciones del 12 de febrero en Caracas, donde perdieron la vida tres venezolanos.
El presidente Nicolás Maduro, por su parte, parece más interesado en otros menesteres, como echar la culpa a EEUU de promover y legitimar los intentos de golpe de Estado a la Revolución Bolivariana.
Mientras el opositor comentó que el Gobierno censura a los medios y bloquea a la red social Twitter ante las protestas convocada por un sector opositor que ha dejado decenas de heridos y detenidos, el mandatario ha hablado en la radio sobre los disturbios de la semana pasada.
Ha asegurado que la manifestación fue fruto de grupos violentos de la oposición y con Leopoldo López, coordinador del partido Voluntad Popular.
El mandatario ha compartido también una conversación que sostuvo con el embajador bolivariano ante la Organización de Estados Americanos (OEA) con sede en Washington, Roy Chaderton, que fue requerido por un funcionario del Departamento de Estado norteamericano para exigir al gobierno venezolano un conjunto de acciones.
Entre ellas la puesta en libertad de los detenidos. Ante ello, Maduro no pudo guardar silencio y tildó la petición de ofensiva. “Son exigencias inaceptables e insolentes y nosotros estamos dispuestos a defendernos de la prepotencia imperial cueste lo que cueste”.
Según él, su Gobierno no se mete en asuntos internos de otros países, menos en los de EEUU y ante esta “salida de tono”, la ha ordenado al ministro de Asuntos Exteriores Elías Jaua declarar a tres funcionarios estadounidenses ‘personas non gratas’.
El sucesor de Hugo Chávez ha señalado también que no acepta amenazas de nadie en el mundo, “no habrá fuerza que nos detenga a los bolivarianos venezolanos en la tarea de hacer justicia y detener el fascismo en Venezuela. Estamos dispuestos a llegar a las últimas consecuencias por defender nuestra independencia y nuestra democracia, que les quede claro”.
