El Gobierno de Cristina Fernández ha aplazado el vencimiento para la participación de los inversores institucionales en la operación del canje de la deuda argentina hasta el próximo viernes 14 de mayo. Según ha asegurado el ministro de Economía de Argentina, Amado Boudou, esto se ha debido al gran ingreso de órdenes para entrar al proceso registrado en las últimas horas, que ha generado un problema operativo. El Gobierno de Cristina Fernández ha aplazado el vencimiento para la participación de los inversores institucionales en la operación del canje de la deuda argentina hasta el próximo viernes 14 de mayo. Según ha asegurado el ministro de Economía de Argentina, Amado Boudou, esto se ha debido al gran ingreso de órdenes para entrar al proceso registrado en las últimas horas, que ha generado un problema operativo.
Desde Boston, donde se encuentra de gira para promocionar la operación ante los grandes inversores, Boudou ha anunciado esta decisión del Gobierno argentino y ha asegurado que se ha producido por cuestiones operativas. Además, el funcionario argentino ha indicado que esta decisión no implica que cambie ninguna otra de las fechas del canje ni el cierre del mismo.
Este anuncio se produce después de que el ministro de Economía mantuviera una serie de reuniones con tenedores de bonos institucionales en Nueva York y con más de 40 inversores mayoristas.
El canje de deuda por unos 20.000 millones de dólares fue lanzado el pasado 3 de mayo y el Gobierno fijó el 12 de mayo como fecha límite para que los inversores mayoristas puedan ingresar a la transacción obteniendo incentivos.
Al cierre de esta edición tampoco se conocía la decisión que han tomado sobre la propuesta del Gobierno de Cristina Fernández, los tenedores de títulos de deuda argentina en default agrupados en la asociación Task Force Argentina (TFA), liderada por el italiano Nicola Stock, que representa a 180.000 inversores con bonos por valor de unos 4.300 millones de dólares.
Estos inversores se negaron a aceptar la oferta que lanzó en 2005 Néstor Kirchner para la recompra de deuda. El entonces presidente ofreció un precio de 30 centavos de dólar por cada bono, es decir un 32% del valor nominal, pero un 24% se negó a vender por debajo del precio establecido en la compra.
Entre estos operadores se encontraban cerca de 200.000 tenedores de bonos italianos, por lo que Boudou inició esta gira de promoción del canje en Italia, y antes de que se cierre el plazo para aceptar la operación tiene previsto volver a este país.
