«Las empresas exportadoras de la región tienen interés de incorporar prácticas verdes para impulsar su proyección exportadora, lo cual abre nuevas oportunidades para la expansión y la mejora del comercio y para una integración más sostenible en América Latina y el Caribe», ha expresado el gerente del sector de Integración y Comercio del BID, Fabrizio Opertti.
Por sectores, se observa que el primario tiene una intención mayor en adaptar su producción a través de prácticas de sostenibilidad. El 84% de las empresas de este sector respondió favorablemente, mientras que la cifra para el sector secundario y terciario fue de 74% y 72%, respectivamente.
FALTA DE ADAPTACIÓN Y PROBLEMAS ECONÓMICOS
Mientras que el 75% de las empresas de la región considera que podría adaptarse a prácticas más ligadas con el medio ambiente, todavía resiste un 6% que cree que no podría hacerlo y un 9% que no lo ve necesario. Este último porcentaje ha caído en dos puntos respecto al año anterior, cuando el 11% de las compañías no valoraba este tipo de prácticas.
Entre los principales obstáculos, las empresas ponen el foco en la inversión y financiación (56%) y las capacidades técnicas (30%). En relación a la primera cuestión, más de siete de cada diez empresas aumentaría la inversión o se mantendría estable en los próximos tres años, según la encuesta del BID.