La cementera mexicana incrementó sus ventas netas un 17% durante el periodo, hasta los 11.035 millones de dólares (9.515 millones de euros), impulsada por unos mayores volúmenes de cemento y agregado y un alza en los precios en la materia prima.
Por regiones, las ventas de México crecieron un 23%, hasta 2.625 millones de dólares (2.263 millones de euros); las de Estados Unidos un 9%, hasta 3.261 millones de dólares (2.811 millones de euros); las de Europa, Asia y África un 17%, hasta 3.628 millones de dólares (3.128 millones de euros); y las de Sudamérica, Centroamérica y el Caribe un 22%, hasta 1.271 millones de dólares (1.095 millones de euros).
De su lado, el resultado bruto de explotación (Ebitda) se incrementó un 24%, con 2.242 millones de dólares (1.933 millones de euros); con un margen sobre ventas del 20,3%, lo que implica un aumento de un punto porcentual con respecto al año anterior.
En el tercer trimestre del año, las ventas del grupo se impulsaron un 10%, con 3.769 millones de dólares (3.250 millones de euros). Por su parte, la empresa se anotó una pérdida neta de 376 millones de dólares (324 millones de euros), un 76% menos que la pérdida de 1.535 millones de dólares (1.323 millones de euros) del tercer trimestre de 2020.
Las menores pérdidas se explican por una reducción en la partida de deterioros de 500 millones de dólares (431 millones de euros), así como por unas mayores ganancias operativas y unos menores costes financieros.
