Reconocer a una mujer es posible a través de su actitud y su aspecto físico permitiendo que se refleje su dulzura, destreza, fuerza y cualquier otra característica que la identifique. Muchas veces se establece un sistema de auto-consentimiento que permite salir de algún bajón que se pueda estar pasando. El aspecto de una persona puede mostrar su estado de ánimo y esto hace que las mujeres se enfoquen en verse bien para sentirse mejor. Esta especie de incentivo propio comienza por la vestimenta más íntima que se usa, la lencería. A partir de esta idea, Irene García Martín inventó su proyecto para empoderar a la mujer con un servicio online de lencería, la Lencería en Caja.
Packs personalizado según los gustos
A través del portal, se descubre una idea innovadora de adquirir este tipo de prendas y que conlleva estupendas ventajas, es la dispuesta a través de una membresía a la que se puede suscribir la clienta y tener acceso a sorpresas cada mes. La fórmula permite la elección del plan que sea de mayor agrado, lo que da acceso a recibir diseños de lencería cada mes.
La calidad que garantiza Lencería en Caja está determinada por los materiales de alto nivel, lo que ha permitido crecer en aceptación entre sus clientes. Además de ello, todos los packs están especialmente seleccionados para cada mujer según sus gustos, estilo de vida…
La belleza interna como principio
La idea del proyecto, no se focaliza solo en la venta de piezas de ropa. También incentiva y promueve el crecimiento personal de sus clientas. Con el pack GOLDEN se tiene acceso a comunidades digitales en las que se abordan temas de autoestima o empoderamiento, entre otros. La idea es reconocer que la belleza interna es el principio de una mujer plena. A través de artículos y retos se tratan temas para mejorar la actitud ante la vida.