Estados Unidos ha intensificado su ofensiva financiera contra el narcotráfico, apuntando ahora a entidades bancarias mexicanas que, según sus investigaciones, sirven como plataformas clave para canalizar el dinero de los cárteles. En concreto, el Departamento del Tesoro, a través de su Red de Control de Delitos Financieros (FinCEN), ha lanzado una ofensiva directa contra tres instituciones acusadas de facilitar el lavado de fondos provenientes del tráfico de fentanilo, un opioide responsable de miles de muertes en EEUU.
EEUU identifica a tres bancos como “fuente principal de preocupación”
Las entidades señaladas —CIBanco, Intercam y Vector— han sido designadas como participantes activos o negligentes en operaciones que canalizan recursos hacia los cárteles. Según el comunicado del Tesoro, estas instituciones están involucradas en actividades que “representan una fuente principal de preocupación en materia de lavado de dinero”, en el marco de la Ley de Sanciones contra el Fentanilo.
Las medidas prohíben operaciones con fondos que transiten por estas instituciones, especialmente aquellas ligadas al sistema bancario estadounidense
CIBanco: vínculos con CJNG y el Cártel del Golfo
De acuerdo con la FinCEN, CIBanco ha mantenido relaciones prolongadas con organizaciones criminales como el CJNG y el Cártel del Golfo. El informe revela que esta entidad facilitó operaciones para financiar la producción de fentanilo con insumos procedentes de China, además de implementar un plan de lavado de 10 millones de dólares en 2023.
Intercam: reuniones con miembros del CJNG
La investigación también apunta a Intercam, acusada de manejar transferencias en dólares para financiar importaciones de sustancias químicas destinadas a la producción de fentanilo. Además, se le atribuyen reuniones directas con miembros del CJNG para planificar esquemas de lavado de dinero.
Vector: flujos ilícitos y fallos en controles internos
Finalmente, Vector fue designada por facilitar operaciones a los cárteles de Sinaloa y del Golfo, ayudándoles a mover fondos ilícitos por más de 3 millones de dólares y financiar importaciones de precursores químicos desde China. La FinCEN también denunció graves deficiencias en sus sistemas de control y prevención contra el lavado de dinero.