La medida, presentada este miércoles en una rueda de prensa, responde a la escasez de controladores aéreos que afecta a todo el país desde el inicio del cierre gubernamental el pasado 1 de octubre. Según la FAA, la falta de financiación y de personal suficiente está provocando retrasos e interrupciones en los principales aeropuertos estadounidenses.
FAA reducirá operaciones para priorizar la seguridad
Duffy explicó que el recorte del 10% “no depende de las aerolíneas ni de sus bases operativas”, sino de “identificar dónde se concentra la presión y cómo aliviarla”. El secretario advirtió que “habrá más interrupciones y frustración” en las próximas semanas, aunque insistió en que el objetivo principal es “garantizar la máxima seguridad en el espacio aéreo”.
La FAA no ha especificado aún qué aeropuertos se verán afectados por la reducción del tráfico aéreo.
Escasez de personal y controladores sin salario
Desde el inicio del cierre, la FAA ha reconocido que mantiene operaciones limitadas en decenas de terminales debido a la falta de personal disponible. Cerca de 13.000 controladores aéreos trabajan sin percibir su salario, según denunció la propia agencia en su cuenta oficial de la red social X, asegurando que están sometidos a “estrés y cansancio enormes”.
El cierre del Gobierno federal ha provocado el mayor periodo sin pago para el personal aéreo en la historia del país.
Mientras el Congreso mantiene bloqueadas las negociaciones presupuestarias, el Departamento de Transporte advierte que las restricciones podrían ampliarse si la crisis se prolonga. El cierre, que supera ya el mes de duración, ha comenzado a impactar de forma directa en la conectividad aérea de Estados Unidos.



