Durante una entrevista en Fox News, el presidente Donald Trump manifestó su rechazo a los resultados de las elecciones presidenciales venezolanas del 28 de julio de 2024, en las que Nicolás Maduro fue declarado ganador con el 51,95 % de los votos, según cifras del Consejo Nacional Electoral (CNE).
El principal candidato opositor, Edmundo González, quedó en segundo lugar con un 43,18 %, según el mismo organismo.
Trump fue tajante al afirmar que los comicios fueron «un fraude» y advirtió que EEUU está monitoreando muy de cerca la situación en Venezuela. Esta postura se alinea con la de otros gobiernos que también han rechazado reconocer el triunfo de Maduro, alegando irregularidades y falta de transparencia en el proceso electoral.
«Estamos siguiendo a Venezuela muy de cerca», expresó Trump, en una clara señal de alerta sobre el desarrollo democrático en la nación sudamericana
Oposición venezolana presenta pruebas de presunto fraude
La Plataforma Unitaria Democrática (PUD), coalición a la que pertenece Edmundo González, divulgó actas electorales que, según su interpretación, demostrarían que el verdadero ganador de las elecciones fue el candidato opositor.
Estos documentos han sido utilizados como base para las denuncias de fraude electoral, reforzando los reclamos de ilegitimidad del proceso.
Además de EEUU, otros países han manifestado dudas sobre la transparencia del sistema electoral venezolano, reforzando el aislamiento internacional del Gobierno de Maduro.
El contexto internacional y sus implicaciones
Las declaraciones de Trump se suman a una creciente presión diplomática sobre Venezuela. La falta de reconocimiento internacional del resultado electoral podría tener consecuencias en materia de sanciones, relaciones diplomáticas y posibles negociaciones multilaterales para una transición política en el país caribeño.
