El presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, ha reclamado en la Asamblea General de la ONU una «pronta» firma del acuerdo entre Mercosur y la UE para «aumentar el intercambio comercial y lograr beneficios mutuos» y ha considerado que «los organismos financieros multilaterales deberían rediseñar sus estrategias» y fomentar una reactivación económica «más humana, solidaria y extraordinaria».
La pandemia ha provocado una crisis económica que ha supuesto «la destrucción de empleos, endeudamiento y dificultades de pagos», ha continuado Benítez, y «solamente trabajando juntos sobre propósitos comunes y una arquitectura internacional moderna y a la altura de las circunstancias» se podrán alcanzar los resultados que «los pueblos necesitan», ha puntualizado.
El presidente paraguayo también ha defendido el multilateralismo como una herramienta «efectiva» para «dar respuestas a las necesidades que compartimos», como la búsqueda de paz, la protección de los Derechos Humanos y del medioambiente o la no proliferación de armas nucleares.
Benítez ha recalcado las «necesidades especiales y desafíos particulares» que enfrentan los países sin litoral, por lo que ha pedido la implementación «efectiva» del Programa de Acción de Viena. Además, ha defendido una transformación del Consejo de Seguridad para hacerlo «más inclusivo y apto ante las amenazas a la paz y seguridad internacionales».
Por último, también ha celebrado el establecimiento de relaciones diplomáticas entre Emiratos Árabes Unidos y Bahréin con Israel, «deseando que estos nuevos vínculos contribuyan a la paz y la prosperidad en Oriente Próximo» y ha apoyado la solicitud de Taiwán de ser incluido en el sistema de la ONU y «las denuncias internacionales contra las violaciones de Derechos Humanos en Venezuela».