El Consejo Monetario Nacional de Brasil, formado por el ministro de Economía, Paulo Guedes, el presidente del Banco Central de Brasil (BCB), Roberto Campos, y el secretario de Hacienda, Waldery Rodrigues, ha aprobado en una reunión extraordinaria varias medidas económicas para ayudar a empresas y familias a reducir el impacto del coronavirus.
La primera medida consistirá en facilitar la restructuración de deudas para las compañías y familias que tengan «buena capacidad financiera». También deberán contar con operaciones de crédito regulares y en curso. Esto permitirá ajustes en sus flujos de efectivo que contribuirán a reducir los efectos temporales derivados del Covid-19.
Esta medida exime a los bancos de aumentar el aprovisionamiento (recursos que deben mantenerse en efectivo en caso de posibles pérdidas) en el caso de que dichas restructuraciones se realicen en los próximos seis meses.
Se estima que en torno a 3,2 billones de reales brasileños (575.316 millones de euros) en créditos pueden beneficiarse de esta medida, cuya renegociación dependerá del interés y la conveniencia de las partes involucradas.
Esta acción reduce los recursos exigidos por los bancos por un año, ampliando la capacidad del capital en el sistema financiero en 56.000 millones de reales brasileños (10.069 millones de euros) que, a su vez, aumenta la capacidad de concesión de créditos en torno a los 637.000 millones de reales brasileños (114.561 millones de euros).
La segunda medida adoptada consiste en la ampliación del uso de capital para los bancos con el fin de que estos tengan mejores condiciones para la renegociación.
En la práctica, esta medida permitirá más espacio y seguridad a los bancos para mantener sus planes de concesiones de crédito o incluso para expandirlos en los próximos meses.
El BCB afirma que sendas medidas son «proactivas» y que facilitarán la acción anticíclica del sistema financiero nacional. Por otra parte, también van en línea con las otras acciones del Gobierno Federal y de otros reguladores financieros internacionales.
Asimismo, las iniciativas se suman a la reciente del BCB de reducir la tasa de reserva requerida en depósitos a largo plazo y mejorar las reglas del indicador de liquidez a corto plazo.
El efecto en conjunto de las medidas supondrá una mejora de liquidez de 135.000 millones de reales brasileños (24.000 millones de euros) para el Sistema Financiero Nacional, que se destinarán a suavizar los efectos del Covid-19 sobre la economía brasileña.
El BCB ha resaltado que dispone de un «amplio arsenal» de instrumentos para ser utilizados para asegurar la estabilidad financiera del país.