El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha anunciado este jueves que la reapertura de la economía es «inminente», pese a que el país se encuentra en los peores momentos de la pandemia de la COVID-19, tras haber registrado un nuevo récord de muertes en un solo día, 1.188.
El mandatario de extrema derecha ha participado este jueves por videoconferencia en una reunión con algunos de los gobernadores estatales para tratar esta situación, así como un almuerzo con el alcalde Río de Janeiro, Marcelo Crivella, quien defendió que la ciudad ya estaba lista para comenzar con su rutina habitual.
«Hoy hablé con el alcalde Crivella sobre temas que son de su responsabilidad. Una muy buena conversación. Estamos a punto de abrir, con responsabilidad, es lógico, el comercio, para que la miseria no se aplique en Brasil», ha contado este jueves a sus acólitos, congregados a las puertas del Palacio de la Alvorada.
En ese sentido, Bolsonaro ha destacado que la reunión con los gobernadores fue «positiva» y ha tenido un tono «conciliador», alejada de los cruces de declaraciones altisonantes de las últimas semanas.
«Tuvimos una reunión muy buena que ya ha generado reflexiones inmediatas. El mercado de valores ha subido, el dólar ha caído mucho. Somos una minoría privilegiada y está en nuestras manos liderar Brasil», ha dicho.
Este nuevo giro de los acontecimientos choca lo que se ha estado viendo en Brasil durante el estallido de la crisis sanitaria, en donde Bolsonaro siempre se ha mostrado contrario a adoptar medidas de confinamiento, a diferencia de la gran parte de las autoridades municipales y estatales.
Ante esta falta de acción del Gobierno federal, el Tribunal Supremo falló en favor de los estados para que pudieran decidir de manera autónoma cómo enfrentarse al avance de la enfermedad.
En su último balance, Brasil ha registrado máximos en cuanto al número de muertes en tan solo 24 horas, 1.188, por lo que el número de víctimas mortales ha ascendido a 20.047.
Brasil es el epicentro de la pandemia en América Latina y el tercer país más afectado tras Estados Unidos y Rusia.
En su último balance, el Ministerio de Salud ha confirmado 18.508 nuevos casos, lo que supone un total de 310.087, así como 1.188 nuevas muertes registradas, superando un nuevo récord diario, lo que asciende a 20.047 el número de víctimas mortales por la enfermedad.
La gestión de la crisis se ha llevado por delante en apenas unos meses a dos ministros de Salud. El primero, Luiz Henrique Mandetta, cayó en desgracia tras mostrarse en desacuerdo con Bolsonaro y sus políticas anticuarentena.
Por su parte, Nelson Teich, con menos de un mes al frente de la cartera de Salud, optó por echarse a un lado ante las numerosas diferencias con el jefe del Estado, entre ellas su negativa a utilizar la cloroquina como remedio para tratar la COVID-19.