En varias ciudades alemanas se celebraron hoy manifestaciones con el fin de pedir más apoyo financiero durante la pandemia para el mundo del tango que se ha visto duramente sacudido por la crisis y se enfrenta a dificultades existenciales en Alemania.
El iniciador de la petición advirtió de la amenaza que esta crisis supone para las escuelas de baile, músicos, DJ y organizadores de viajes de tango. «De la noche a la mañana, se perdió casi el 100 por ciento de los ingresos», dijo, a la vez que comentó que los alquileres, por ejemplo, se tenían que seguir pagando.
Para detener la propagación del nuevo coronavirus, tuvieron que cerrar muchos centros en todo el país. Las reglas para la reapertura son establecidas por cada estado federado.
La propietaria de una escuela de tango en Stuttgart, en el sur de Alemania, explicó que, de acuerdo con las reglas ahora vigentes sobre los metros cuadrados, solo se pueden ofrecer cursos muy reducidos. Además, dijo que solo se puede bailar con la pareja o con la gente del mismo hogar, lo que excluye a muchos alumnos de sus clases.
El tango forma parte del patrimonio cultural inmaterial del mundo desde hace varios años. Con este día de movilización, en el que, por ejemplo, la gente bailó ante la Cancillería en Berlín, los organizadores quisieron señalar los problemas actuales.
