El Producto Interior Bruto (PIB) de Brasil rebotó un 7,7% durante el tercer trimestre en comparación con el trimestre anterior, pero sufrió una contracción del 3,9% en comparación con el mismo periodo de 2019, según datos ofrecidos por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) este jueves.
Entre enero y septiembre, el PIB del país sudamericano se contrajo un 5% con respecto al año anterior, debido a las caídas de la industria (-5,1%) y servicios (-5,3%), que se compensaron por el crecimiento de los servicios de agricultura (2,4%), en el marco de la pandemia y sus consecuencias económicas.
En comparación con el segundo trimestre, la economía más grande de Latinoamérica incrementó un 7,7% debido a las subidas del 14,8% en industria y del 6,3% en servicios, acorde con la retirada de las medidas de distanciamiento social y el cierre de fábricas y comercios por la pandemia. Por su parte, la agricultura se redujo un 0,5% con respecto al segundo trimestre.
Entre las actividades industriales, destacó el crecimiento del 23,7% en las industrias manufactureras. También crecieron las actividades de electricidad, gas y agua(8,5%), construcción (5,6%) e industrias extractivas (2,5%).
En el sector servicios crecieron todos los sectores. Así, el comercio rebotó hasta el 15,9%; transporte, almacenaje y correo subió un 12,5%, mientras que otras actividades de servicios subieron un 7,8%. Los servicios de información y comunicaciones (3,1%); administración , defensa, salud pública y educación y seguridad social (2,5%); actividades financieras, seguros y servicios afines (1,5%) y actividades inmobiliarias (1,1%).
Desde la perspectiva de gastos, la formación bruta de capital fijo creció un 11% con relación al trimestre inmediatamente anterior. El gasto de consumo de los hogares se expandió un 7,6% y el gasto de consumo del gobierno aumentó un 3,5%.
Las exportaciones de bienes y servicios cayeron un 2,1%, mientras que las importaciones de bienes y servicios cayeron un 9,6% con relación al trimestre anterior.
LA ECONOMÍA CAYÓ UN 3,9% EN COMPARACIÓN CON 2019.
En relación a la variación interanual, el PIB brasileño cayó un 3,9% con respecto a 2019, lo que supone la tercera contracción consecutiva en la economía del país.
Por ramas de actividad, solo la agropecuaria registró un comportamiento positivo, con un crecimiento del 0,4% con relación al mismo periodo de 2019. El resultado se explica principalmente por el crecimiento de la producción y ganancias de productividad en la actividad agrícola, que compensó el pobre desempeño de ganadería y pesca.
De su lado, la industria cayó un 0,9%. Dentro de la actividad, la construcción retrocedió un 7,9% debido a la caída de la ocupación; mientras que las industrias manufactureras mostraron una variación negativa del 0,2%. Las actividades de electricidad, gas y agua crecieron un 3,8%, impulsadas por la mejora de las tarifas. Las industrias extractivas crecieron un 1% en comparación con el tercer trimestre de 2019, impulsadas por el crecimiento de la extracción de petróleo y gas, según el IBGE.
El sector servicios, por su parte, cayeron un 4,8% con respecto al mismo período de 2019, destacando la caída de otras actividades de servicios (-14,4%) y transporte, almacenaje y correo (-10,4%). También hubo contracción en administración, defensa, salud pública, educación y seguridad social (-5,4%), comercio (-1,3%), información y comunicaciones (-1,3%). Al mismo tiempo, crecieron las actividades financieras, seguros y servicios relacionados (6,0%) y las actividades inmobiliarias (2,7%).
El Gasto de Consumo de los Hogares cayó por tercer trimestre consecutivo (-6,0%), influenciado por la pandemia COVID-19 que, además de afectar negativamente al mercado laboral, provocó una caída en la oferta y demanda de servicios con un peso relevante en el consumo de familias.
La Formación Bruta de Capital Fijo se redujo un 7,8% en el tercer trimestre de 2020. La magnitud de esta caída se justifica por la disminución de la producción e importación de bienes de capital, así como por la caída de la Construcción.
En el sector externo, las Exportaciones de Bienes y Servicios cayeron un 1,1% y las Importaciones de Bienes y Servicios cayeron un 25,0% en el tercer trimestre de 2020.
Las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) para la economía brasileña en 2020 apuntan a una contracción del 5,8%, mientras que el Banco Mundial proyecta una caída del 5,4%.