«Se están sobreponiendo distintos fenómenos en una temporada en la que tradicionalmente no solía suceder. Por un lado, comenzó la lluvia en el este y centro de Bolivia, por otro lado, persisten granizadas en el sur y centro. El fenómeno de la sequía sigue intenso en el Chaco, estos tres fenómenos se sobreponen», explicó el funcionario en contacto con la prensa local.
La granizada afectó la producción de las uvas en el departamento de Tarija (sur) y a 14 comunidades y cerca de 3.000 hectáreas de soya en el departamento de Santa Cruz (este).
La autoridad boliviana indicó que aún se cuantificaron las perdidas y daños causado por los fenómenos climáticos.
En las primeras dos semanas del año, ya se atendieron a más de 460 familias afectadas en 12 municipios en La Paz (oeste) y Cochabamba (centro) y se entregaron 167 toneladas de ayuda.
En 2022, los nueve departamentos de Bolivia fueron afectados principalmente por sequía, 358 municipios con varios fenómenos climáticos adversos, 171.800 familias damnificadas y se entregó 4.055 toneladas de ayuda humanitaria.