«En algún momento, la relación entre dólares y pesos adentro de la economía va a ser tan grande que vamos a poder dolarizar, vamos a poder cerrar el Banco Central y habremos terminado con ese cáncer que heredamos a partir de 1935», dijo el mandatario durante un acto en la ciudad de Córdoba (centro).
Aunque que la pobreza aumentó once puntos porcentuales durante el primer semestre del año, hasta afectar al 52,9 por ciento de la población, Milei también dijo que el Ejecutivo acababa de bajar este indicador «en ocho puntos porcentuales», al disertar en el 47° aniversario de la Fundación Mediterránea, un laboratorio de ideas sobre economía.
El jefe de Estado consideró que la economía «se encuentra en recuperación», pese a que el producto interior bruto (PIB) cayó un 3,4 por ciento en el primer semestre y aseguró que la salida del denominado cepo, es decir, el control del Estado sobre la compra y venta de divisas, está «mucho más cerca» que en diciembre, cuando comenzó su Gobierno.
«Cuando la brecha entre la base monetaria tradicional y la amplia, coincidan, al mismo tiempo que se limpien los stocks y la inflación sea cero, en ese momento no habrá problemas de stock, de flujo, ni sobrante de pesos. Ahí abrimos el cepo sin ningún tipo de sobresalto», dijo Milei.
Con el respaldo de haber conseguido bajar la inflación en los últimos meses, el presidente destacó el programa de ajuste fiscal y recortes que lleva adelante y que logró, a su juicio, «frenar la posibilidad de una hiperinflación que hubiera duplicado la cantidad de pobres».
Tras señalar que la baja de la inflación es «la política social más poderosa», el mandatario argentino aseguró que antes de salir del cepo es necesario «sanear y restaurar el patrimonio del Banco Central», una entidad que «si emite, genera daño».
Y «si no hace nada: ¿para qué lo tengo?», cuestionó.
Después de su diatriba al Banco Central, «que para lo único que sirvió fue para enriquecer a los políticos y empobrecer a los argentinos», el presidente afirmó que su Gobierno es el mejor «de la historia».
En otro tramo de su discurso, Milei arremetió contra el primer presidente elegido en las urnas tras la última dictadura (1976-1983), el fallecido Raúl Alfonsín (1983-1989), al que «paradójicamente lo muestran como el padre de la democracia, siendo que fue partidario de un golpe de Estado».
Representantes de la Unión Cívica Radical (UCR), partido que ha apoyado en el Congreso varias de las leyes que impulsó la actual gestión, cuestionaron las acusaciones del jefe de Estado contra Alfonsín justo en el Día de la Recuperación de la Democracia, a 41 años de que el radical ganara las elecciones y comenzara el proceso de recuperación democrática.
El Gobierno de Milei tiene por prioridad lograr el superávit fiscal y financiero para contener la inflación, lo que ha provocado un duro ajuste en las finanzas públicas que ha impactado de modo recesivo en la economía real, con la licuación de los salarios y una retracción de la actividad.