«No podemos darnos el lujo de desunirnos», ha advertido el presidente Fernández, quien además ha puesto en valor que, pese a que le «cuestionan los modos» en los que ejerce la política, finalmente hace «lo que hay que hacer».
El mandatario y su ‘número dos’ han hecho públicas en los últimos días sus diferencias, que además se suman a una carta firmada por intelectuales cercanos a Fernández de Kirchner en la que se critica el liderazgo del presidente, tal y como recoge el diario ‘La Nación’.
«Debemos ser los primeros en ponernos de acuerdo, desde nuestra parte nadie quiere alguna acción de ruptura (…) La unidad es absolutamente necesaria», ha remarcado el presidente, quien, sin embargo, sí que ha reconocido discrepancias en el liderazgo del país.
Así pues, el inquilino de la Casa Rosada ha explicado que, pese a que «escucha a todos los sectores» del oficialismo, él es quien finalmente «toma las decisiones». «Me sentiría mal si por nuestras diferencias le abrimos paso ala derecha», ha reconocido.
En este punto, Fernández ha abogado por «aprender a convivir con las diferencias», más en un contexto histórico marcado por las negociaciones del Gobierno argentino con el Fondo Monetario Internacional para el pago de la deuda.
«La sociedad está muy agobiada y no quiere más ruidos. Pasó cuatro años muy malos con (el expresidente Mauricio) Macri y otros dos con la pandemia. Debemos ser los primeros en ponernos de acuerdo», ha explicado.
Precisamente sobre este asunto, el presidente ha incidido en que el acuerdo alcanzado con el organismo monetario «permite acumular divisas» y, por tanto, «combatir la inflación». «Es imperioso que nos ocupemos de los precios. Los alimentos suben a raíz de la guerra», ha apuntado.