Roger Agnelli, presidente de la minera Vale desde hace diez años, ha buscado el apoyo de los diputados y senadores de la oposición para evitar que el Gobierno brasileño interfiera en la minera para destituirlo de su cargo. El encuentro del ministro de Hacienda, Guido Mantega, con el presidente del Banco Bradesco, que posee el 21,21% de la compañía, a petición de Dilma Rousseff, a provocado la irritación de algunos políticos que han solicitado que Mantega comparezca en una audiencia pública para dar explicaciones. Roger Agnelli, presidente de la minera Vale desde hace diez años, ha buscado el apoyo de los diputados y senadores de la oposición para evitar que el Gobierno brasileño interfiera en la minera para destituirlo de su cargo. El encuentro del ministro de Hacienda, Guido Mantega, con el presidente del Banco Bradesco, que posee el 21,21% de la compañía, a petición de Dilma Rousseff, a provocado la irritación de algunos políticos que han solicitado que Mantega comparezca en una audiencia pública para dar explicaciones.
El presidente de Vale ha intercambiado varios correos electrónicos con los líderes del Partido Socialdemócrata de Brasil (PSDB) y del Partido Demócrata (DEM), según recoge la prensa local, para movilizar a la oposición contra la injerencia del Gobierno de Dilma Rousseff en la minera.
Algunos de los políticos, como José Mendoça del DEM de Pernambuco, han respondido solicitando la comparecencia del ministro de Hacienda a los debates del Congreso para explicar la intromisión del Gobierno en la política de Vale. El demócrata ha afirmado que esta situación perjudica el rendimiento de las acciones de la compañía y, con ello, a los accionistas minoritarios.
Asimismo, los directivos de la compañía se han posicionado del lado del presidente de Vale y, según recogen los medios brasileños, están dispuestos a entregar sus cargos si Agnelli abandona la empresa. La petición de apoyo a la directiva ha circulado también entre los trabajadores, que han expresado su apoyo a Roger Agnelli en los foros sociales.
El Estado posee una mayoría del accionista, un 61,51%, de Vale, Valepar. Sin embargo, para que pueda intervenir en el cambio del presidente de la compañía sería necesario el 75% de los votos, por lo que es necesario el apoyo de al menos uno de los otros mayores accionistas, como Bradespar, división de inversiones del Banco Bradesco, o la japonesa Mitsui.
Esta situación llevó al ministro de Hacienda a reunirse con el presidente de Bradesco, Lázaro Brandao, el pasado día 18 de marzo en Sao Paulo para solicitar el respaldo del Banco en el esfuerzo del Gobierno por encontrar alternativas para reemplazar a Roger Agnelli, durante la asamblea general de la compañía que se celebrará el próximo 19 de abril.
