La Organización de Estados Americanos se encuentra en permanente crisis desde hace largo tiempo, nada más que remitirse al hoy, para confirmarlo, ya que es evidente que no alcanza a destrabar el ya preocupante conflicto en Honduras, lo que como contrapartida potencia la delicada situación latente en el organismo multilateral de la región. La Organización de Estados Americanos se encuentra en permanente crisis desde hace largo tiempo, nada más que remitirse al hoy, para confirmarlo, ya que es evidente que no alcanza a destrabar el ya preocupante conflicto en Honduras, lo que como contrapartida potencia la delicada situación latente en el organismo multilateral de la región.
No olvidemos que el puntapié inicial de los problemas de la OEA se remontan a un prolongado tiempo atrás y al momento varios comienzan a preguntarse cual cierto es su futuro como foro decisorio sin no esgrime capacidad resolutiva, sólo observamos pura declamatoria.
A efectos de refrescarnos en algo con el devenir de la organización recordemos que si bien la Primera Conferencia Internacional Americana, ocurrió en 1890 en Washington DC (creó la Unión Internacional de las Repúblicas Americanas y su secretaría permanente, la Oficina Comercial de las Repúblicas Americanas); y en 1910, fue rebautizada como Unión Panamericana, el nacimiento formal de la OEA fue el 30 de abril de 1948, prometiendo en su declaración de principios, consolidar la democracia y promover los derechos humanos, algo que nunca ocurrió.
Incontables golpes de Estado ocurrieron desde entonces en la mayoría de los países integrantes de la organización y sería por demás hipócrita desconocer las miles de violaciones a los derechos humanos, y la OEA quedó inmóvil, limitada a un rol de espectador de las sucesivas crisis.
Vale recordar hechos, no palabras, cuando en su octava cumbre, en Punta del Este, Uruguay, el 31/01/1962, se suspendió a Cuba, con la abstención de la Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Ecuador y México.
Con excepción de USA, el resto de los países integrantes de la OEA, aún aquellos que votaron a favor de la suspensión, mantuvieron sus vínculos diplomáticos bilaterales con Cuba, con lo cual la situación fue grotesca, y la OEA se afirmó como un supuesto reducto diplomático de USA, que le aporta la mayor cantidad de dinero para su financiamiento.
Dado que Cuba ya no era miembro activo de la organización, la OEA se desentendió de las consecuencias del bloqueo comercial estadounidense a la isla del Mar del Caribe; y por lo tanto, la OEA tampoco podía reclamar a Cuba por las violaciones de los derechos humanos de los opositores.
Por lo tanto, la OEA resignó su competencia regional, a la vez que no suspendía los derechos plenos de sus asociados cuando las democracias eran reemplazadas por gobiernos de facto, traicionando así uno de sus principios fundacionales.
Otra situación de crisis de la OEA ocurrió con la Guerra de Malvinas, cuando en 1982 no pudo liderar alguna acción positiva que impidiera la actividad bélica, dejando esa importantísima función por la trascendencia que el conflicto en sí mismo determinaba para la región, en acciones unilaterales de algunos de sus miembros, sin olvidar la participación explícita de EEUUy Rusia en el conflicto.-
Por estos días apreciamos como curiosamente fue en San Pedro Sula, Honduras, un bunker de los partidarios de Roberto Micheletti, donde el e de junio de 2009, la 39 Asamblea General de la OEA aprobó la reinclusión de Cuba a la entidad, aunque, hasta el momento no se formalizó el regreso de Cuba al organismo.
Así en momentos en que la crisis institucional ha llegado a Honduras, la OEA no consigue ni unificar posiciones ni concretar acciones que permitan destrabar el conflicto, lo que reiteramos es por demás preocupante.-
Como dos púgiles antes del gong, en el rincón izquierdo Manuel Zelaya es acusado de haber violado la Constitución hondureña , en el derecho; las Fuerzas Armadas hondureñas son acusadas de haber ejecutado una acción ilegal en el cómo desplazaron al Presidente, y se cuestiona que el Legislativo y Judicial hondureños han tolerado esa irregularidad.
Surge como analgésico las próximas elecciones de noviembre, sin embargo corren un serio peligro de no ser reconocidas como legítimas, situación que sería por demás para un país que hoy día se encuentra aislado casi por completo de la comunidad internacional y con inocultables problemas en su intercambio comercial y financiero.
La tarea determinante que se espera de la OEA es la reinserción de Honduras, territorio en el que hace apenas 90 días ocurrió la reunión anual de la organización y resulta que hoy día Honduras se encuentra con su membresía suspendida.-
La otra espada que pesa sobre la cabeza de la organización es que USA se lleva o regular o mal con la mayoría de los países miembros de la organización. La Administración Bush no motorizó como hubiese sido deseado las relaciones interamericanas -pérdida de confianza y mucha confrontación- y el presidente Barack Obama hasta el presente no consigue normalizar la situación, ya que es factible que no haya encontrado el punto de equilibrio justo de como muñequear la historia, es de suponer que determinen decisiones rápidas coherentes y efectivas, no es mucho pedir, el futuro de la región está en juego.
