El presidente de Uruguay, José Mujica, ha comenzado a “cobrarse” el coste político por dar su apoyo a la candidatura del ex presidente de Argentina, Néstor Kirchner, a la secretaria general de la Unión de Naciones de Sudamérica (Unasur). Tal y como había previsto el mandatario uruguayo, las críticas no se han hecho esperar por parte de la oposición, que han calificado de error grave el apoyar a Kirchner. El presidente de Uruguay, José Mujica, ha comenzado a “cobrarse” el coste político por dar su apoyo a la candidatura del ex presidente de Argentina, Néstor Kirchner, a la secretaria general de la Unión de Naciones de Sudamérica (Unasur). Tal y como había previsto el mandatario uruguayo, las críticas no se han hecho esperar por parte de la oposición, que han calificado de error grave el apoyar a Kirchner.
Pedro Bordaberry, ha afirmado que la postura que tenía que haber llevado a cabo el Gobierno de Uruguay en la votación, era abstenerse. «Pero además, Néstor Kirchner no es merecedor de la confianza de los uruguayos, creo que así lo sentimos todos, porque nos ha hecho mucho daño», ha agregado Bordaberry.
Jorge Larrañaga, senador y ex candidato a la vicepresidencia por el Partido Nacional también ha criticado la postura del presidente Mujica. «Como uruguayo y nacionalista no me va a gustar ver como secretario del Unasur a quien contribuyó a cortar los puentes», ha asegurado Larrañaga.
Pablo Mieres, líder del Partido Independiente, tampoco se ha quedado callado. Mieres, ha asegurado que la postura de José Mujica en la cumbre del Unasur fue confusa. «Si hubo abstención de Uruguay en la votación de Kirchner como secretario general apoyamos la decisión, pero si hubo voto a favor, no», ha afirmado Mieres.
El presidente de Uruguay, que ya preveía que la oposición le recriminase su voto a favor de Kirchner, aseguró que había tomado la decisión de acompañar el consenso de todos los presidentes y de dar prioridad a la integración de América Latina.
